Charisma Carpenter, la actriz que interpretó a Cordelia Chase en Buffy the Vampire Slayer y Angel, acusó a Joss Whedon de tener conductas abusivas durante su trabajo en ambos programas.

En una extensa declaración compartida a través de redes sociales, Carpenter aseguró que “Joss Whedon abusó de su poder en numerosas ocasiones mientras trabajábamos juntos en los sets de Buffy the Vampire Slayer y Angel”.

“Si bien él encontraba divertida su mala conducta, solo sirvió para intensificar mi ansiedad por el desempeño, desempoderarme y alejarme de mis compañeros”, agregó la actriz. “Los inquietantes incidentes desencadenaron una condición física crónica que aún sufro. Es con un corazón dolorido y palpitante que digo que me las arreglé de forma aislada y, a veces, de forma destructiva”.

En su relato Carpenter además acusó que Whedon se habría comportado de mala manera con ella durante su embarazo y, además de tacharla de “gorda”, habría impuesto más carga laboral para ella pese a las recomendaciones de su médico.

“(Él) me preguntó si ‘me lo iba a quedar’ y manipuló mi fe y mi feminidad como arma en mi contra”, escribió Carpenter en la parte de su testimonio que habla sobre una reunión a puertas cerradas que habría tenido con Whedon luego de que el director se enterara de su embarazo. “Procedió a atacar a mi personaje, burlarse de mis creencias religiosas, acusarme de sabotear el programa y luego me despidió sin ceremonias después de la temporada una vez que di a luz“.

Carpenter también señaló que habría recibido una llamada para trabajar a la 1 de la mañana como “represalia” después de que su médico le recomendara acortara sus horas de trabajo cuando comenzó a experimentar contracciones de Braxton Hicks debido a los “días largos y físicamente exigentes”.

Según recoge Vanity Fair, Carpenter ya había hablado de los problemas que experimentó con Whedon a raíz de su embarazo durante un panel en una convención realizada en 2009. Sin embargo, en su declaración la actriz dice que hay dos factores que la llevaron a compartir su testimonio ahora: el movimiento Time’s Up y la investigación en sobre las refilmaciones de Justice Lague.

En ese sentido, Carpenter no solo contó que participó de las indagatorias propiciadas por WarnerMedia, sino que también aseguró que apoyaba a Ray Fisher, el actor que interpretó a Cyborg en Justice League y quien también ha entablado varias acusaciones sobre el comportamiento de Whedon.

“Recientemente, participé en la investigación de Justice League de WarnerMedia porque creo que Ray es una persona íntegra que dice la verdad”, escribió Carpenter. “Su despido como Cyborg en The Flash fue la gota que colmó el vaso para mí. Aunque no estoy sorprendida, me duele profundamente. Me preocupa y me entristece que en 2021 los profesionales TODAVÍA tengan que elegir entre denunciar irregularidades en el lugar de trabajo y seguridad laboral”.

En su testimonio Carpenter planteó que pese a que Whedon “era malo y mordaz, despreciaba a los demás abiertamente y a menudo tenía favoritos, enfrentando a las personas entre sí para competir por su atención y aprobación”, trató de justificar sus acciones y aceptó esas condiciones laborales pensando en su familia. No obstante, a la luz del movimiento Time’s Up y las acusaciones de Fisher, la actriz finalmente decidió hablar.

Como madre soltera cuyo sustento familiar depende de mi oficio, tengo miedo. A pesar de mi temor por su impacto en mi futuro, ya no puedo permanecer en silencio. El tiempo se acabo y es necesario. Es la hora”, sentenció.

Según recoge Variety, Amber Benson, otra actriz de Buffy the Vampire Slayer, utilizó su cuenta de Twitter respaldar a Capenter y acusar que la serie tenía “un ambiente tóxico y comenzaba desde arriba”.

Todo mientras Fisher apoyó a Carpenter y la calificó como “una de las personas más valientes” que conoce. “Siempre estaré agradecido por su coraje y por prestar su voz a la investigación de Justice League”, escribió el actor.

Hasta el momento Joss Whedon no ha respondido a estas acusaciones.