Lechones, se les acabó la fiesta. 

La tarjeta Junaeb, esa fiel compañera de bajones, almuerzos en el mall y principal motor de la industria de las papas fritas del país, ha elegido comenzar a vivir sano y a partir del 11 de mayo, ya no podrá ser usada para comprar comida chatarra. Esto incluye cualquier menú que incluya frituras, bebidas azucaradas, grasa y otros tipos de aderezos y azúcares de dudosa procedencia. Es decir, todo lo rico.

Los locales que actualmente aceptan pagos con la tarjeta Junaeb, o la Juna como le dicen sus amigos, deberán incluir menús de comida saludable si es quieren poder seguir aceptando el beneficio. Y no es un cambio menor, ya que se trata de más de 12 mil locales alrededor de todo Chile, dentro de los que se incluyen 37 cadenas de comida rápida.

Estos locales tendrán la opción de incorporar en su oferta alguno de los 200 menús que han sido aprobados por la Junaeb para poder ser comprados con la tarjeta. Los locales también tendrán la oportunidad de hacer sus propuestas de almuerzos saludables, los cuales deben seguir las condiciones de la Ley de Etiquetado.

De todas formas, se espera que el 11% de estudiantes que actualmente usa sus beneficios en patios de comida lo sigan haciendo, aunque con más lechuga y menos papas fritas que en el pasado.