Outbreak es una antigua película de 1995 protagonizada por Dustin Hoffman que abordaba el surgimiento de un virus mortal de rápido contagio que llega hasta suelo estadounidense y genera un peligro de pandemia de escala mundial. Y desde que el coronavirus está en la contingencia, las búsquedas sobre la película se han múltiplicado en Google.
Lo mismo sucede con Contagion, el thriller epidemiológico dirigido por Steven Soderbergh en 2011 que aborda cómo un virus mortal comienza a propagarse a partir de una ciudadana estadounidense, cerrando ciudades y elevando la preocupación a nivel mundial.
Ambos proyectos no fueron precisamente grandes éxitos de taquilla en su momento. Contagion hizo 136 millones a nivel mundial, lo que la situó en el lugar 61 de la taquilla en 2011. Por su parte, Outbreak congregó $189 millones de dólares y se quedó con el puesto 14 del año 1995.
Pero aún así nuevamente están en boga a raíz de lo que ha estado ocurriendo con el coronavirus. Algo que ha favorecido especialmente a las visualizaciones de la película de Soderbergh.
El siguiente es el gráfico de la tendencia de búsqueda a nivel mundial de ambas películas en la plataforma de Google.
Ambas películas están disponibles en diversos servicios de streaming alrededor del mundo, lo que obviamente las ha favorecido. En el caso de Chile, Outbreak sigue disponible en la plataforma de Netflix, mientras que Contagion está en HBO Go.
Pero aunque ambas son dos de los casos más populares, también hay otros proyectos que podrían tener una nueva vida si estuviesen más ampliamente disponobles. Por ejemplo está la apocalíptica The Stand, adaptación de la novela de Stephen King, que próximamente tendrá una nueva versión televisiva para contar la historia del "Capitán Trips", una infección que mata a gran parte de la población humana antes de que se lleve a cabo la batalla definitiva entre el bien y el mal.
También está Doce Monos, el clásico de Terry Gilliam sobre un tipo que clama venir de un futuro que fue aniquilado por un virus, e intenta batallar contra su creación y sus propios problemas psicológicos. Y en el terreno zombie, también existen obras como Rabid de David Cronenberg que abordan enfermedades que se vuelven incontrolables.
Pero, claro está, por la contingencia probablemente seguirán en el tapete producciones como estas. Especialmente si el virus sigue expandiéndose, como sucedió durante esta jornada en Chile.
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