Si hay algo que Disney ha dejado de lado en los últimos años son los Premios Oscar. Claro, sus divisiones de animación dominan las estatuillas de su categoría, pero en el aspecto live-action se han quedado atrás. Algo que se acrecentó cuando Miramax, su división controlada por los hermanos Weinstein, fue vendida. The English Patient y Shakespeare in Love fueron hits de Disney bajo aquel sello.
Pero en los últimos años, la compañía se enfocó más en explotar sus grandes marcas, provocando que cuatro patas sustenten toda su mesa: Lucasfilm, Pixar, Marvel Studios y los live-action basados en las producciones de Walt Disney Animation.
La adquisición de Fox podría cambiar aquello, ya que a diferencia de Disney, ese estudio tiene la división Fox Searchlight, enfocada en películas de más renombre y que les han permitido obtener el éxito con obras como Slumdog Millionaire, 12 Years a Slave, Birdman y la reciente The Shape of Water.
Bob Iger, el CEO del conglomerado de Disney, afirmó ahora que no planean cambiar nada de ese exitoso negocio.
"Nuestra adquisición pendiente de 21st Century Fox ampliará nuestra capacidad para impulsar nuestro valor a largo plazo como una compañía de entretenimiento extraordinaria con el contenido, las plataformas y el alcance para satisfacer las crecientes demandas de los consumidores en todo el mundo", aseguró a sus accionistas.
"No tenemos ningún plan por ahora de cambiar lo que hacemos. Tenemos toda la intención de mantener el negocio de Fox Searchlight. Creemos que están en el negocio de hacer películas de alta calidad y creemos que hay una amplia oportunidad para que nosotros como compañía apoyemos esos esfuerzos", recalcó.
En definitiva, de concretarse la opción de adquisición, ahora no solo será posible que Disney lidere la recaudación, sino que también los Oscar sigan multiplicándose en sus vitrinas.