“Hoy incorporamos 5G al iPhone”, Con esas palabras, Tim Cook, CEO de Apple, comenzó el pasado martes su anuncio que presentó a la nueva línea de smartphones de la compañía.
Según el ejecutivo, el iPhone 12 hará uso de las nuevas redes debido a que “la 5G supone un salto de rendimiento al descargar y cargar contenido, transmisión de video de más alta calidad, juegos más responsivos, interactividad en tiempo real y mucho más”.
“Las redes 5G son más avanzadas, con una latencia más baja y menor congestión de red, de modo que contarán con mayor velocidad aún en zonas densamente pobladas. Y la 5G también ayuda a proteger su privacidad y seguridad, ya que no tendrán que conectarse a menudo a redes wifi públicas desconocidas y no seguras”, agregó Cook.
Durante la presentación, desde Apple llegaron a postular que: “el iPhone 12 se diseñó con 5G en mente, incluyendo la posicón de antes nuevas que rodean el armazón de aluminio”.
En ese ámbito, las redes 5G, como sucesoras de las 3G y 4G que revolucionaron a las tecnologías asociadas a los dispositivos móviles, y que ayudaron a establecer al smartphone como un aparato polifuncional, son clave para el futuro interconectado, tanto de consumidores como para el sector empresarial.
Algunos especialistas sostienen que ese último sector es el más beneficiado. Fernando Saiz, director de Estrategia, Regulación y Asuntos Corporativos de Movistar. planteó en agosto pasado que “el 5G no es la panacea” a la hora de conectar a las personas.
"Sé que es impopular, pero el 5G es útil para las empresas y los empresarios, es para robotizar procesos industriales, es para las minas y asume que la conectividad básica a los hogares ya está resuelta, no viene a resolver ese problema”, dijo.
Pero el Presidente Sebastián Piñera ha reiterado que el 5G “nos va a cambiar la vida", en un “salto cósmico, copernicano”. Aunque, claro está, dicho cambio tomará tiempo.
Mientras en países como Estados Unidos las empresas de telecomunicaciones avanzan rápidamente para extender el alcance de estas nuevas redes, y compañías como T-Mobile cuentan con detallados mapas interactivos para presentar el alcance de la cobertura, y Telefónica espera llegar al 75% de la población española antes de fin de año, en Chile recién se concretó un anuncio de licitación en agosto pasado.
En aquél momento se estableció que este mes se concretaría “la recepción y apertura de las propuestas”, solicitando “estándares mínimos de calidad de servicio en las zonas que se conecten a 5G”. Y la promesa principal es comenzar las pruebas antes del fin de la actual administración.
“Si todo sale bien estaríamos al final de este gobierno teniendo estaciones base operando comercialmente en 5G. Es un proceso complejo porque se hacen cuatro licitaciones simultáneas y no existió ninguna en 7 años”, sostuvo Pamela Gidi, subsecretaria de Telecomunicaciones.
Es decir, si acceden en Chile a uno de los cuatro modelos del iPhone 12, que desde su diseño estarán volcados completamente a las redes 5G, solo podrán usarlos en 4G en el corto plazo. Y eso es lo que pasará con cada uno de estos nuevos grandes anuncios de smartphones de gama alta, ya que mientras las compañías destacarán las mejoras para el 5G, la expansión de esas redes tomará más tiempo en países como Chile. Y la espera será larga para que toda la red esté solventada.
Tengan en cuenta que desde el Gobierno, el anuncio del 5G estableció que la licitación se basará en cuatro principios: calidad, cobertura, neutralidad tecnológica y seguridad. Al mismo tiempo, se estima que el despliegue de la red involucrará a una inversión que podría llegar a los $3000 millones de dólares en infraestructura en los próximos cinco años y se requerirá duplicar la cantidad en el país, llegando a las 60 mil unidades.