Uno de los personajes más vilipendiados desde la galería o tribuna de cualquier estadio del fútbol chileno es el "Señor PF". A tal punto llega su mala fama que cualquier arquero sin manos es comparado con el corpóreo que -se supone- anima cada entretiempo de nuestro balompié. Eso sí, su trabajo es ingrato: debe dejarse anotar goles de penales que son ejecutados por niños que patean una pelota de plástico.

Pero el "Señor PF" tuvo su día de venganza. Ocurrió en una fría noche de octubre del año pasado, en el Estadio Fiscal de Talca. Esta vez, fue él quien se paró en el punto penal con la misión de reivindicarse y dejar atrás la mala prensa acumulada.

El arquero -víctima circunstancial del desquite- se llamaba "Maulito", un loro tricahue que las oficiaba como la mascota oficial de los Juegos Binacionales que se disputaron en la Región del Maule por esa fecha. En el cara a cara, ganó la justicia:

https://www.youtube.com/watch?v=C-mzDMIBIjI

EL DATO: Ese día, Rangers ganó 1-0 a Unión San Felipe con gol de Sebastián Céspedes, cuya historia del horror ortográfico asociado a su nombre ya fue publicada por Mouse.