Según un reporte del portal Moviehole, actualmente en Disney existen conversaciones "para hacer algo con El Extraño Mundo de Jack (The Nightmare Before Christmas), probablemente una secuela, pero un live-action también es posible".
La película original, una propuesta stop-motion dirigida por Henry Sellick (Coraline) y producida por Tim Burton, se convirtió en un clásico de culto pese a que durante su estadía en cines no se convirtió en un hit y solo recaudó alrededor de $75 millones de dólares en el mundo.
Sin embargo, con el correr de los años, Disney ha logrado maximizar las ganancias sobre esta película a partir de la venta de merchandising y reediciones en alta definición que han mantenido a la producción original en el imaginario colectivo.
Aún así, por las características de la obra original, una versión live-action tendría aún menos sentido que una secuela, pero en los últimos años en Disney se metieron de lleno en el negocio de la nostalgia que rehacen sus películas animadas, por lo que a nadie le debería sorprender que algo como esto al menos esté siendo considerado.
Pero más allá de que existan discusiones, lo cierto es que la primera pregunta que deberían hacerse los ejecutivos es precisamente la que rara vez se hacen en los estudios cinematográficos: ¿Tenemos que hacer eso?
La respuesta, obviamente, generalmente implica un no rotundo, pero más puede el poder del dinero y las posibilidades de recaudar fácilmente con una marca conocida que tiene una legión de fans.