Desde el año pasado se viene arrastrando producto de la pandemia una escasez mundial de materiales semiconductores, o chips, que ha afectado la manufactura de productos tecnológicos como las nuevas consolas PlayStation 5 y Xbox Series X, lo que ha llevado a una demanda de tecnología que no puede ser satisfecha a tiempo.
Ahora un reportaje de The Guardian indica que esta escasez se está transformando en una crisis y que podrían pasar años antes de que se solucione.
Aunque en un principio se detuvo la producción normal debido a las consecuencias de la pandemia, en The Guardian sostienen que hoy el problema persiste porque, aunque se ha retomado el ritmo, hay un aumento en la demanda motivado por los cambios de hábito que propició la pandemia.
El analista de medios y tecnología Neil Campling explicó que “hay una tormenta perfecta de factores de oferta y demanda. Pero básicamente, hay un nuevo nivel de demanda que no se puede satisfacer, todos están en crisis y está empeorando”.
De esta manera, Sony y Microsoft no han podido alcanzar sus metas propuestas de ventas para sus mas recientes consolas. De la misma manera, Apple y Samsung, las dos compañías que mas compran chips en el mundo, han dicho que los lanzamientos de sus nuevos modelos de smartphone podrían ser pospuestos, a pesar de que Samsung es simultáneamente el segundo productor de chips mas grande.
Según el artículo, la industria mas golpeada en este minuto es la de los automóviles ya que son los que menos compran estos componentes en comparación y, según razona Campling, “si Apple gasta $56 billones en chips al año y sigue creciendo ¿A quien le vas a mantener el flujo de abastecimiento primero?”
Un efecto de la crisis que podrá observarse pronto es el alza en los precios, ya que según The Guardian, los fabricantes subieron sus costos por segunda vez en lo que va del año, por lo que la crisis podría durará todavía un tiempo.