Dicen por ahí que los padres tienen que empujar a sus hijos para que persigan sus metas y alcancen sus sueños, pero al parecer un padre británico se tomó demasiado en serio este dicho.

En pleno encuentro entre el Bow Street FC y el Ysgol Llanilar, dos equipos de fútbol sub-8 de Gales, el jugador con la camiseta número ocho del Ysgol Llanilar tomó posesión del balón y comenzó a acercarse al arco del Bow Street.

El arquero del equipo rival estaba distraído, así que la jugada parecía un gol inminente para los jugadores de camiseta amarilla. Sin embargo, nada hacía presagiar que el padre del joven portero sacrificaría todo para evitar el gol del equipo rival.

En un movimiento inesperado, el desesperado padre que había puesto todas sus ilusiones deportivas en su hijo, se acercó al niño y, sin dudarlo un segundo, lo empujó.

El niño, que vestía una camiseta roja, cayó abruptamente al piso ante la mirada atónita de los presentes y, tal como había apostado su padre al realizar el atrevido movimiento, finalmente logró evitar el gol.

https://youtu.be/8i83krhyqUw

Pero esta historia no tiene un final feliz, ya que al sacrificio del joven arquero fue en vano. Si bien logró repeler el gol en primera instancia, Chris Wilkins, quien compartió la escena en Twitter,  reveló que en el rechazo del balón los jugadores de Ysgol Llanilar lograron convertir. 

Nunca sabremos que pasó por la cabeza de ese niño portero, que quizás estaba pensando en llegar a su casa a jugar o en lo que iba a comer después del partido. Pero sus pensamientos fueron interrumpidos por la acción de su padre.

Por lo menos tenemos claro que el papá del niño tenía la mente puesta en el juego y sus prioridades claras. No estaba dispuesto a aceptar una derrota, aún cuando eso implicara darle un "empujoncito" al talento de su hijo. 

Además no queremos ni siquiera imaginar cómo sufre este padre cuando ve partidos por televisión, especialmente cuando no puede motivar en su particular estilo al arquero de su equipo favorito.