Samsung apuesta todo con la cámara del nuevo Galaxy Note 8

Tras el fracaso que significó para Samsung el lanzamiento del Galaxy Note 7 durante el 2016 -teléfono que debió ser retirado del mercado por incendiarse solo por usarse- la marca está convencida de que podrá recuperar a parte del público perdido tras el fiasco de sus baterías.

Es así como en un evento con bombos y platillos realizado en la ciudad de Nueva York, la compañía presentó al nuevo miembro de la familia Note: el Galaxy Note 8. Como siempre, se trata de un celular destinado al público ejecutivo, con una pantalla de 6,3 pulgadas, sin bordes visibles y un lápiz con el que no solo se puede dibujar y tomar notas que se convierten inmediatamente en texto, sino que también operar por completo las funciones del teléfono.

Pero más allá de sus especificaciones técnicas, como su procesador Snapdragon 835, sus 6GB de RAM o sus 64 GB de memoria, ampliables con tarjetas Micro SD, la nueva función que se robó las miradas y el escenario del evento estuvo en las cámaras con las que contará el equipo.

Por primera vez Samsung se une a la tendencia que ya han seguido marcas como Huawei, Apple y LG de incorporar dos cámaras traseras para sacar fotografías, pero esta vez la compañía coreana elevá la apuesta, entregando por primera vez dos cámaras con estabilización óptica. Esto significa que ambas cámaras pueden, y son utilizadas al mismo tiempo para combinarse y mejorar las fotografías tomadas. Una de las ventajas es que se podrá hacer un zoom de hasta 2x sin perder la calidad de la imagen.

La otra ventaja está dada por un nuevo modo llamado Live Focus, el cual genera el mismo efecto bokhe que se ve en el modo retrato de teléfonos como el iPhone 7 o lo teléfonos Huawei con lentes Leica, pero con la posibilidad de que el usuario modifique en tiempo real, la cantidad y el tipo de desenfoque que tendrá la imagen.

Esto pone a la cámara doble del Galaxy Note 8 como una de las más avanzadas del mercado en cuanto a sus modos de uso, aunque habrá que esperar a tenerlo en las manos para saber si se traduce en calidad.

A Chile, el equipo estaría llegando durante el mes de octubre a un precio en prepago de $849.990. Un valor acorde al público para el cual está pensado el producto, pero que no sabemos si será lo suficientemente atractivo como para que volvamos a confiar en la marca que el año pasado casi termina quemando su credibilidad.

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