El director George Miller, quien colaboró con Hugh Keays-Byrne en dos de las películas de la saga de Mad Max, recordó al actor que lamentablemente falleció esta semana, elevando no solo a su talento artístico, sino que también a la condición humana del intérprete de Immortan Joe..

En conversación con Indiewire, el cineasta recalcó de partida que: “hay personas que llenan por completo el mundo cuando estás con ellas. Ciertamente Hugh Keays-Byrne era una de ellas”.

Dichas palabras se condicen con las que dedicó la actriz Charlize Theron, quien a través de su cuenta de Twitter destacó que: “fue increíble que pudiera interpretar tan bien a un malvado señor de la guerra siendo un alma tan amable y hermosa”.

La primera Mad Max

George Miller de partida rememoró que su trabajo con Keays-Byrne en la primera película de Mad Max, estrenada en 1979, solo fue posible debido a que el grupo teatral británico Royal Shakespeare Company estaba en Australia.

El presupuesto de Mad Max era tan bajo que solo podíamos permitirnos actores que vivieran en Melbourne, que es donde se rodaba la película“, dijo Miller. “Hugh estaba en Sydney y el grupo de actores con el que estaba también era de Sydney. Así que dijimos: Mira, no podemos permitirnos traer a todo el mundo acá abajo, y Hugh dijo: Bueno, ¿puedes enviar las motocicletas y nosotros iremos?”.

“Así que colocamos las motos en el tren y ellos viajaron. Les tomó dos días ir de Sydney a Melbourne y durante ese tiempo se convirtieron en la pandilla de Toecutter“, agregó remarcando que Keays-Byrne fue también el pegamento que mantuvo unida a la realización de aquella primera Mad Max.

Al principio lo encontré formidable hasta el punto de dar miedo porque estaba muy metido en el papel. La verdad es que era una persona cálida, dulce y que era muy abrazada por todos... Aprendí sobre la actuación de él, probablemente más que cualquier otra persona con la que trabajé”, explicó Miller.

El trabajo en Mad Max: Fury Road

Miller intentó colaborar en varias ocasiones más con el actor. No solo lo volvió a elegir para interpretar al Detective Marciano en la película de Justice League que intentó llevar a cabo en 2009, lo que finalmente no se concretó, sino que también contempló darle un rol de voz en películas como Babe y Happy Feet.

Pero la experiencia solo pudo llevarse a cabo una vez que tras años de desarrollos, e intentos fallidos de iniciar las filmaciones a raíz de problemas de presupuesto e imprevistos meteorológicos, se comenzó a concretar aquella obra maestra llamada Mad Max: Fury Road.

Allí, en el desierto, durante el arduo rodaje, no había mejor persona con quien estar. Era muy colaborador. La relación que tenía con todos los actores y el equipo de especialistas, que eran los War Boys, era muy fuerte. En el set, siempre se burlaba de ellos de una manera muy divertida. Todos esos actores respondían a él”, postuló.

George Miller también destacó que hubo una gran razón por la que Hugh era perfecto para el rol de Immortan Joe: “¡Los ojos! Sus ojos llevan ese poder. No hay otra forma de describirlo. La estatura, el comportamiento y la voz”.

Hugh encarnaba todo eso. Si estuviera contigo ahora mismo, sentirías ese carisma natural que tenía. La gente tendía a acercarse a él de alguna manera. Pensar que la presencia ya no está disponible para el mundo es muy triste“, remarcó el director. “Me han dicho que estaba realmente aceptando su mortalidad y me dijeron que sus últimos días estuvieron llenos de su humor y alegría habituales”, expresó adelantando que ya piensa en formas de hacer un tributo al actor en la precuela que estará centrada en Furiosa.

En definitiva, el director de Mad Max también subrayó que a Keays-Byrne nunca se le subieron los humos a la cabeza debido a la gran recepción de Immortan Joe como uno de los villanos cinematográficos definitivos del siglo 21. De hecho, prefería adoptar el nickname de “ToeJoe”, fusionando así a los nombres de sus dos personajes en la saga. Claro, nunca podría haber abierto las puertas del Valhalla, brillante y cromado como Immortan Joea, sin antes haber sido ToeCutter.

Hugh Keays-Byrne falleció a los 73 años de edad.