El pasado 15 de mayo, Donald Trump, presidente de Estados Unidos,  declaró una "emergencia nacional" firmando una orden ejecutiva contra empresas como Huawei, bajo la promesa de  actuará contra adversarios que están "creando activamente vulnerabilidades en la infraestructura y servicios de tecnología".

Menos de un mes después, the Financial Times reporta que Google está presionando con un lobby al Departamento de Comercio de Estados Unidos, para que le permitan continuar con sus negocios con Huawei.

Según la publicación, ejecutivos de alto rango defenderían la actual exención que tienen para colaborar con Google, que se extenderá hasta agosto y que evade la firmada prohibición que impide que las compañías estadounidenses trabajen con el gigante tecnológico chino.
Los ejecutivos de Google solicitarían una nueva extensión o, más aún, estar completamente exentos de la prohibición bajo un argumento que involucra a la seguridad nacional, en base a los riesgos que argumentan que podrían surgir si Huawei crease su propia versión de Android.
La publicación agrega que Google sostendría en su lobby que existen riesgos al dar espacio a que se creen dos tipos de sistema operativo, dando pie a que una versión híbrida de Huawei tenga más errores y potencialmente sea más proclive a ser hackeada que una versión oficial de Android. Es decir, su impulso también tendría relación con el interés de Google de resguardar su actual trinchera y posición de dominio.

Por ahora, Huawei sigue amparada por el permiso otorgado por el Departamento de Comercio, que otorgó un período de gracia de tres meses que removió al gigante chino de la lista negra impulsada por la administración Trump.