El portal Politico, a partir de fuentes que definieron como funcionarios directamente familiarizados con el asunto, informó que tanto el Departamento de Energía de Estados Unidos como la Administración Nacional de Seguridad Nuclear, que es el ente encargado de administrar el arsenal nuclear del país, tienen evidencia de que hackers obtuvieron acceso a sus redes como parte de una campaña de infiltración cibernética masiva.

Posterior a esa revelación, la Agencia de Ciberseguridad y Seguridad para la Infraestructura (CISA) postuló que existió una intrusión en los sistemas informáticos que fue llevada a cabo por hackers rusos. El hecho, plantean, representa un “grave riesgo” tanto para el gobierno como para las redes privadas.

De acuerdo a la agencia AP, la CISA confirmó además que la acción comprometió a varias agencias gubernamentales y su “infraestructura crítica”, en una acción que a grandes rasgos fue “un ataque avanzado” que no fue de fácil detección y que inclusive podría no ser tan simple de deshacer.

“Este actor amenazante ha demostrado sofisticación y habilidad compleja en estas intrusiones. La CISA cree que retirar al actor amenazante de los entornos comprometidos será muy complejo y desafiante”, explicó.

Por ahora se desconoce exactamente qué infraestructura e información fue comprometida con el ataque informático.

El pasado miércoles, el FBI, la CISA y la oficina del Director Nacional de Inteligencia ya habían reconocido la existencia de una importante brecha de seguridad, aunque no habían entregado más detalles salvo confirmar que tuvieron conocimiento de la intromisión cibernética durante los últimos días.