Por largo tiempo se ha establecido una idea: James Bond podría ser negro. Quizás hasta mujer. Es una bandera que levantan todos aquellos que desconocen al personaje al centro de sus propuestas, que debe ser blanco y heterosexual por el contexto de su historia.
Pero en el último tiempo se ha instalado esta tendencia que habla de cambiar géneros y etnias a personajes, como una medida para garantizar cierta diversidad o saldar viejas cuentas de épocas en donde el canon daba pie a que los héroes fuesen hombres blancos.
Al respecto, en The Sun le consultaron a Steven Spielberg sobre una idea: ¿Hay espacio para que a futuro haya una Indiana Jones mujer? En lo que respecta al director, al menos no es una idea que le moleste después de estrenar en 2019 la ya anunciada Indiana Jones 5.
"<em>Tendríamos que cambiarle el nombre de Jones a Joan. Y no habría nada malo con eso...<strong> Esta será la última película de Indiana Jones de Harrison Ford</strong>, estoy muy seguro de eso, pero <strong>ciertamente esto va a continuar después de eso</strong></em>"
Y he ahí el principal punto. Spielberg tiene claro que habrá más Indiana Jones después de Harrison Ford, ya que tras la adquisición de Lucasfilm por parte de Disney, no es muy difícil comprender que la compañía buscará seguir explotando a una marca tan popular como esa. El problema es que la idea de un Indiana Jones que no sea interpretado por Harrison Ford no es fácil de digerir.
En cuanto a la opción de que exista una versión femenina, quizás la mejor recomendación es que en Hollywood revisen lo que se ha hecho con algo llamado Tomb Raider.