Si todavía no están convencidos de que el mundo de los influencers da para todo, prepárense para conocer la siguiente historia.
Recientemente una modelo que se hizo conocida por Instagram llamada Monique Marina Agostino fue arrestada en Australia por una serie de inusuales crímenes.
De acuerdo a news.com.au, esta celebridad virtual de 25 años estaba vinculada a una variedad de delitos que incluían desde robos enmascarados realizados por menores de edad que ella ayudaba a escapar, pasando por delitos relacionados con drogas y hurto en tiendas hasta la posesión de un cuchillo en una tienda Target.
Pero lo más particular de este caso no es que una influencer de Instagram se dedicara a cometer delitos, sino que Agostino particularmente era conocida por posar con trajes de Catwoman.
De acuerdo a news.com.au, en su eliminada cuenta de Instagram, Agostino solía compartir fotos en traje de baño y con atuendos de Catwoman. Algo que habría impulsado su popularidad en esa red social.
Pero mientras Agostino se disfrazaba como el alter ego de Selina Kyle, la influencer también trataba de imitar otro aspecto del personajes de DC Comics y se dedicaba a cometer robos.
Sin embargo, según precisa news.com.au, aquí no estaban en juego diamantes ni grandes fortunas dignas de captar la atención de Batman, sino que Agostino se dedicaba a apuntar a locales de comida.
De hecho, según ese medio, Agostino comenzó una especie de carrera delictiva en 2018 cuando con 22 años “llevó a varios adolescentes varones a los robos que cometieron en la costa norte de Sydney”.
En ese contexto, además de participar de los robos a locales de comida, también se quedó con una tarjeta de crédito en el robo a un café y posteriormente la usó para comprar $11.55 dólares australianos en comida en un McDonald’s.
Por otra parte, Agostino también robó una chaqueta de $90 dólares australianos de la tienda Supre y fue acusada por tener un cuchillo en un local Target y poseer de tabletas de diazepam.
Pero pese a que parece que Agostino quiso imitar la carrera de Catwoman como ladrona, la influencer no logró evadir las repercusiones y finalmente fue sentenciada a dos años de prisión en el Centro Correccional de Mujeres de Silverwater desde donde recién podrá salir después de un mínimo de 18 meses.