Antes del estreno de The Avengers, las películas de Marvel Studios no eran precisamente un hit. Inclusive algunas de ellas, como Capitán América o Thor, no tuvieron una buena performance. Pero el trabajo hecho por la compañía posibilitó que la película del equipo se transformase en un hit que solventó a todo su universo de película, al romper todas las expectativas con más de mil 500 millones de dólares alrededor del mundo. Más de 620 millones se hicieron solo en Estados Unidos.

En el caso de Warner Bros y su universo DC, decidieron tener otro tipo de jugada. De la secuela de Man of Steel desprendieron una nueva versión de Batman, para luego dar pie a una Suicide Squad que empantanó todo debido a la pésima recepción de la crítica. Solo la recepción de Wonder Woman fue una luz que fue tanto o mejor recibida que la mayor parte de las películas Marvel. Pero en términos de recaudación, la expectativa del estudio siempre ha sido lograr superar la barrera de los mil millones de dólares.

Pero ni la inclusión de tres nuevos personajes, incluyendo a dos tan reconocibles como The Flash y Aquaman, ni el impulso dado por la película de la amazona, permitieron que las cifras de Justice League en Estados Unidos estuvieran a la altura. Por debajo de las expectativas, el blockbuster dirigido por Zack Snyder y refilmado por Joss Whedon solo logró amasar según las proyecciones un total de $96 millones de dólares durante sus tres primeros días.

Actualizado: La cifra definitiva fue de $94 millones.

Esa cifra la instala como el estreno más débil del universo DC, inclusive bajo una Man of Steel que recaudó 128 millones de dólares durante su primer fin de semana de estreno.

Aunque un estreno de ese estilo sería un hit para cualquier producción, el problema es que el objetivo de Warner Bros. es que todo el universo DC esté a la altura de las franquicias más populares, como Star Wars y Marvel Studios. Pero este estreno bajo los 100 millones vuelve a demostrar que las cosas no están siendo bien acogidas y el resultado final no bastó. No hay boca a boca.

Tengan en cuenta que Batman v Superman logró un sólido estreno de $166 millones de dólares, pero se desplomó en la semanas posteriores, mientras que Wonder Woman solo alcanzó los $103 millones de dólares, pero en base a pura consistencia en las semanas posteriores, se instaló como la película de orígenes más exitosa.

Con solo un 39% de las críticas siendo positivas hacia Justice League según los números de Rottentomatoes, el único salvavidas que le está quedando es el mercado internacional. Los números, especialmente los generados en países como China o Brasil, potenciaron el lanzamiento de la película hasta superar los $280 millones de dólares a nivel mundial. Y esa cifra es más alta que lo recaudó Wonder Woman en su primer fin de semana en el mundo ($223 millones), pero el discurso que primará siempre para los estudios son los números en Estados Unidos.

Tengan en cuenta que tras The Avengers, cada película individual elevó considerablemente su nivel de recaudación. Con Justice League no está claro qué sucederá, pero los lanzamientos previos no ayudaron en nada a que la película grupal explotara en sus números, por lo que Warner Bros. ahora tiene una tarea no menor: reevaluar completamente la dirección de su universo de superhéroes.

Esta costoa superproducción probablemente no perderá dinero, pero es un fracaso que una película que reúna a tanto personaje reconocido, sea incapaz de transformarse en un hit en las boleterías. De ahí la idea de que sea la anti-Avengers. La reunión, en este caso, no sirvió para explotar  y es una verdadera lástima considerando las proyecciones de la historia.

Pero la gran preocupación es que estos resultados no impacten negativamente el futuro de esta franquicia, ya que a pesar de que la crítica en generla no la ha abrazado, su propuesta en lo individual no pasan desapercibidas y tienen todo el potencial para que aprendan las lecciones.