En medio de todas las reacciones por la multimillonaria adquisición de Disney sobre las divisiones de entretenimiento de Fox, sin duda el punto que más discusión genera entre las audiencias es lo que esto significa para Marvel Studios.

A través de su comunicado, la corporación Disney informó que este acuerdo les dará la oportunidad de "reunir a los X-Men, Cuatro Fantásticos y Deadpool con la familia Marvel bajo el mismo techo y crear mundos e historias más complejas y ricas, con personajes interrelacionados tal como las audiencias han demostrado amar".

En ese punto, realza uno de los elementos más llamativos del trato. En el futuro cercano, el año 2019, Marvel Studios tendrá que cerrar el telón con The Avengers 4. Con esa película concluirán su exitosa primera etapa, marcando el fin del trato de actores como Robert Downey Jr, Chris Evans y, probablemente, Chris Hemsworth.

Una y otra vez, Kevin Feige ha reiterado que eso no significa el fin, ya que tienen planeadas decenas de películas adicionales y algunos miembros del elenco se mantendrán, mientras siguen expandiendo sus historias con nuevos personajes.

En ese contexto, la adquisición representa el gran salvavidas. Dejando de lado a Tony Stark o Steve Rogers, ahora Disney puede volver a sus raíces. Diciéndole adiós al multimillonario y dándole la bienvenida al Profesor X y Reed Richards, Marvel finalmente puede volver al foco original de sus personajes históricamente más populares y no teniendo que dividir su torta en base a los derechos cinematográficos.

Solo los derechos cinematográficos dieron pie a que personajes que históricamente estuvieron en una segunda línea, como el propio Iron Man, tuviesen mayor relevancia, mientras los mutantes y los Richards fuesen completamente disminuidos en los cómics, perdiendo relevancia de forma importante en la última década. Pero todas esas jugadas finalmente terminarán.

Obviamente a partir de ahora los fans se preguntarán si actores como James McAvoy o Michael Fassbender continuarán, aunque obviamente al incorporar a los personajes al MCU preferirán partir de cero y no amarrarse a lo ya hecho. Pero considerando que el único blindado es Deadpool, y es probable que Disney no se meta en su lucrativo terreno categoría R por ahora, probablemente lo más importante es que un tercer reinicio finalmente sí puede representar la vencida para que nos den unos Cuatro Fantásticos como corresponde en la pantalla grande.

Con el telón de su tercera fase cayendo en 2019, perfectamente un cohete disparado al espacio puede representar un nuevo nacimiento para llevar al universo Marvel hacia la siguiente etapa. Hay tantas cosas que la primera familia y los mutantes pueden aportar, que realmente las posibilidades son casi infinitas. Tanto como para finalmente matar a la Downeydependencia.

Ese es probablemente lo más relevante para Marvel Studios con este trato, que en definitiva concluirá en 12 o 18 meses. Justo para cuando Marvel inicie su próxima era.