Las locuras de Jorge "Loco" Castillo, el presidente de Everton que comentó el Festival de Viña del Mar
El "recordado" timonel ruletero armó un equipo de ensueño para la Primera B, pero al poco tiempo terminó internado en una clínica viñamarina. Además, en la última elección fue candidato a concejal. Conoce su historia.
Jorge Castillo es uno de los personajes más recordados en Viña del Mar.
En enero de 1996 ilusionó a los hinchas de Everton con un equipo de ensueño: Jaime Pizarro, Gustavo De Luca, Juan Carlos Ibáñez, José Daniel Morón, Francisco Hörmann y Marcelo Fracchia.
El detalle es que ese año el equipo militaba en la Primera B, tras haber descendido el año anterior. Por eso, el tema de conversación de todos los hinchas del fútbol era el nuevo plantel ruletero.
Además, como entrenador contrató a Leonardo Véliz, quien venía de dirigir a la Sub 20 chilena en el Mundial de Qatar. Y como si fuera poco, el mito cuenta que también quería fichar al colombiano Carlos Valderrama.
Castillo, empresario local y dueño de una línea de microbuses, llegó a la presidencia en diciembre de 1995 y pagó de su bolsillo 50 millones de pesos para que el club quedara sin deudas. Pero eso no fue todo: En una iniciativa por identificar a la ciudad con el club, Castillo mandó a pintar las murallas y postes de las calles viñamarinas con los colores azul y amarillo.
El mito, además, cuenta que también mandó a pintar al gato que vivía en la sede evertoniana.
Sin embargo, ya dijimos que Everton estaba en el ascenso. Ello, por cierto, siempre limita la entrada de dinero. Por este motivo, todos los cracks debieron partir y buscar clubes que realmente pudieran pagar sus salarios.
Como si fuera poco, y en ese mismo enero de 1996, Castillo fue internado en la Clínica Betania de Viña del Mar por un cuadro psicótico. Ello lo obligó a renunciar a la presidencia, dejando una deuda de 450 millones de pesos. A partir de ese instante, su apodo de "Loco" cobró más fuerza que nunca en la ciudad jardín.
Posteriormente, ese mismo año, la revista Don Balón le realizó una entrevista.
- ¿Cómo está su salud?
"Excelente. Como usted me ve. Sólo estoy enfermo de ganas de que Everton pueda ganar."
En la misma, Castillo entregó sus peculiares razones sobre el fracaso de su gestión. "Al tiempo, me faltó mucho tiempo. Incluso íbamos a debutar con Vélez Sarsfield, pero no me salió el auspicio de las camisetas para pagarlo. Eran 400 millones que también servirían para cancelar los sueldos de los jugadores", dijo.
Lo sorpresivo de todo esto es que la entrevista fue realizada después de que Castillo se desempeñara como comentarista del Festival de Viña del Mar en una emisora local.
En todo caso, a Castillo se le atribuye un legado que permanece hasta hoy: Fue quien habría sugerido cambiar el nombre de "Segunda División" a "Primera B". Además, en las últimas elecciones municipales, se presentó como candidato a concejal por Viña del Mar, representando a Renovación Nacional.
No le fue bien.
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