El mercado de los televisores es cada vez más competitivo y cada vez es más difícil hacerse notar por algún motivo que no sea el precio del producto. Eso lo sabe muy bien LG, una de las principales compañías del mundo de la imagen y el entretenimiento, quienes presentaron en la última edición de la feria CES, que comienza de manera oficial el día de mañana, una gran oferta en productos para los fanáticos del cine y la TV.
La empresa mostró un proyector capaz de desplegar imágenes en 4K, un televisor de 88 pulgadas con resolución 8K, pero quizás lo más novedoso de su showcase estuvo en la presentación del primer televisor 4K que se puede enrollar.
Se trata de un monitor OLED de 65 pulgadas, con capacidad para mostrar contenido en UHD, pero que además, tiene la posibilidad de convertirse en un rollo. ¿Para qué? Bueno, aparte de la novedad de poder ver una pantalla hecha un rollito, el concepto muestra que así es mucho más fácil el transporte del equipo, además de que se ve como si fuera sacada directamente de un capítulo de Black Mirror.
Para que se hagan una idea, así es como se ve la pantalla mientras se va sacando de su pedestal.
Y así termina cuando está totalmente desenrollada.
De la pantalla aun se desconocen precios o planes de lanzamiento. Probablemente se trate, por el momento, de una tecnología solo de demostración, aunque de todas formas, sirve para entender lo mucho que está avanzando la tecnología de televisores y que, de seguro, los monitores que vayan saliendo serán cada vez más y más delgados y cercanos a lo que estamos viendo en la ciencia ficción.