Durante el año 2020, a raíz de las consecuencias de la pandemia de COVID, las superestrellas de la WWE comenzaron a generar transmisiones en la plataforma Twitch que impulsaron fuertemente sus ingresos.
Ante aquella situación, Vince McMahon ordenó parar ese tipo de negocios, poniendo barreras para que los luchadores tuviesen conexiones monetarias con plataformas que están fuera del amparo directo de la WWE.
Inclusive esta medida fue algo que se prohibió si sus estrellas usaban sus nombres reales, en vez de las marcas registradas por la compañía, por lo que los canales entraron en una pausa permanente. Luego se informó que la WWE tomaría control y repartiría porcentajes en base a los acuerdos económicos ya existentes, algo que potenció la polémica y generó el descontento entre los luchadores.
Pero ahora Fightful Select informó que la WWE y Twitch han logrado un nuevo acuerdo que permitirá que los luchadores vuelvan a usar sus canales.
El acuerdo en cuestión implicaría que las ganancias generadas por los canales se repartan entre tres partes, con los luchadores y la propia Twitch obteniendo la tajada mayor
La única restricción para el acuerdo implicará que los luchadores de otras promociones no podrán aparecer en el canal a menos que la WWE lo permita de antemano.
Tengan en cuenta que la monetización de las superestrellas de la WWE ya ha causado varias controversias. Por ejemplo, la luchadora Mandy Rose, excampeona de NXT, fue despedida luego de que se diese a conocer su contenido para adultos en OnlyFans. Pero lo anterior le generaba ingresos aún más altos que los que obtenía por la empresa de lucha libre.