A la fecha, Han Solo: Una Historia de Star Wars es la quinta película más vista del año en Estados Unidos. Sin embargo, sus cifras son consideradas como un fracaso, ya que internacionalmente simplemente no resultó y no podrá concretar ganancias debido al alto costo de su producción.
Más aún, a Los Increíbles 2 le bastó menos de una semana en cartelera para superar la recaudación de la producción de Lucasfilm en Estados Unidos. Y ese golpe debe haber sido fuerte al interior de un Disney acostumbrado a que sus películas de Star Wars superasen los mil millones de dólares sin problemas.
En ese escenario, Collider informa que a raíz de la decepción de su performance en la taquila, Lucasfilm decidió detener de forma indefinida la realización de sus planeados spinoffs de Star Wars.
Esa decisión incluye a la película de Obi-Wan Kenobi en manos de Stephen Daldry, director de Las Horas, y el proyecto de Boba Fett a cargo de James Mangold (Logan).
En el sitio afirman que Daldry y su equipo ya no están involucrados en el desarrollo y dan a entender que como Mangold estaba en conversaciones iniciales, su trato ya no correría. Otros proyectos rumoreados, como una secuela de Solo, una película de Yoda o un spin-off de Lando están congelados.