Tras la derrota de Moro el manga de Dragon Ball Super comenzó con su nuevo arco presentando una serie de nuevos personajes, y las líneas centrales a desarrollar, todo mientras Gokú y Vegeta continúan entrenando para volverse más fuertes. En este escenario, mientras los saiyans continúan su entrenamiento con Whis y Beerus, es que se dio a conocer parte del origen de la raza Namek.

Desde el planeta Namek, es que se escucha a uno de los ancianos enseñarle a unos niños el origen de las Esferas del Dragón y su raza, apuntando que como ya todos saben las esferas se encuentran en planetas donde habitan namekianos, y que estás pueden variar en tamaño y alineación.

Continuando con su explicación, el anciano relata que “No conozco todos los planetas donde viven namekianos pero debería haber más” (dejando de lado la Tierra y el nuevo planeta Namek) y agregando que “después de todo, los namekainos vinimos a este universo desde otro mundo”.

Es así como nos enteramos que estos no son originarios del Séptimo Universo, que es donde habitan Gokú y todos sus amigos, y podría llevar a una explicación de por qué existen las Esferas del Dragón.

En el capítulo también tenemos la oportunidad de conocer a un nuevo namek, el cual vive en el planeta Cereal con Granola, donde también existen unas Esferas del Dragón, pero son sólo dos. Según explica este, antes habían decenas de habitantes de su raza en el planeta pero ahora sólo queda él.

Tras una serie de sucesos, el capítulo culmina con Granola reuniendo las dos esferas y pidiendo volverse el más fuerte del universo.