Hoy fue publicado el capítulo número 54 del manga Dragon Ball Super, continuando con los enfrentamientos en la Tierra contra los soldados de Moro, y los entrenamientos de Gokú y Vegeta.
Antes de continuar te advertimos, que relataremos diferentes elementos del reciente capítulo, por lo que te recomendamos leerlo antes de continuar. Este se encuentra disponible de forma oficial a través de Manga Plus de Shueisha,y puedes acceder a través del siguiente enlace.
No digas que no te lo advertimos: ALERTA DE SPOILER
Este nuevo capítulo estuvo marcado por el regreso a la acción de Gohan, quien demostró que no ha estado perdiendo el tiempo, así como por un nuevo plan de Moro para acabar con los guerreros Z y a la vez volverse más poderoso.
En el capítulo anterior pudimos ver que Gohan llegó hasta donde Piccolo y Krilin se enfrentaban a los soldados de Moro.
Ahora el hijo de Gokú inició su enfrentamiento con Siete Tres, quien había robado las habilidades de quien fue su maestro. Demostrando sus poderes es que Gohan lo logró arrinconar con bastante facilidad. "Es que yo conozco mejor que nadie tus técnicas, Piccolo", señaló al Namek que se veía sorprendido por la facilidad con la que había contrarrestado cada ataque.
Cuando todo parecía ir a favor de los guerreros de la Tierra, es que los secuaces de Moro activaron su plan de emergencia. Siete Tres revela que podía almacenar las técnicas de otros guerreros, y activó los poderes de Moro absorbiendo de esta forma el Kame Hame Ha de Gohan.
Tras absorber los poderes de los guerreros, y a la vez, contactarse con Moro, es que el villano se enteró que Gokú y Vegeta no se habían rendido y se encontraban entrenando para derrotarlo. Movido por el interés de absorber la energía de la Tierra junto con la de los dos saiyajin, es que se pone un tiempo límite para su llegada: Dos meses.
Mientas todo esto pasa en la Tierra, Merus se encuentra entrenando con Gokú en una Habitación del Tiempo. En este momento es que nos enteramos de un nuevo detalle del integrante de la Patrulla Galáctica, y es que este no necesita comer al igual que Whis, quien da la casualidad que se encuentra observando todo desde la distancia.
Finalmente el capítulo concluye con una conversación entre Whis y el Gran Sacerdote: el tema de conversación: Merus. Aunque aún no está confirmado cada vez son más los elementos que apuntan a que este algún tipo de relación tiene con los ángeles, quienes se supone deben ser imparciales y no estar a favor de bien o el mal.