Martin Scorsese dice que "productos desechables" han desplazado al arte del cine

Martin Scorsese no está contento con la forma que está tomando la industria del cine en la actualidad. A lo largo de toda la promoción de su nueva película, The Irishman, el director ha expresado que está molesto por los modelos de distribución que predominan hoy en día y que en última instancia perjudican la variedad de cintas disponibles en cartelera.

Sin embargo, los comentarios del director no han resonado por eso sino porque en una de sus declaraciones al respecto apuntó contra las películas de superhéroes de Marvel Studios, cuyo lugar predominante en la cartelera es uno de los problemas que está al centro de los reclamos del director.

Por supuesto, a raíz de esos comentarios la conversación se ha transformado en una disputa entre Scorsese, los fanáticos y responsables de las películas de Marvel. No obstante, el director se mantiene fiel a sus reparos y en una nueva entrevista con The Guardian los expresó una vez más.

Al ser consultado respecto a todo el revuelo que causaron sus declaraciones, Scorsese volvió a abordar su punto dando a entender que su problema no es específicamente con las películas de Marvel Studios -más allá de que dijo que no le gustaron, algo que es totalmente legítimo-, sino que su crítica es al predominio que tienen esas y otras gigantescas producciones en las salas de cine.

"Obviamente hemos estado discutiendo mucho sobre esto, que los cines han sido comandados por películas de superhéroes, ya sabes, solo personas volando, golpeando y chocando, lo cual está bien si quieres verlo", señaló el director. "Es solo que no hay espacio para otro tipo de películas. No sé cuántas (películas) más podré hacer, tal vez esto es todo. (The Irishman) es lo último. Entonces, la idea era al menos hacerla y tal vez mostrarla por un día en la NFT, tal vez un día en la Cinémathèque en París. No estoy bromeando".

Scorsese firmó un acuerdo con Netflix para crear The Irishman lo que en la práctica significó que, pese a que la película se hizo como el director quería, esta tuvo solo un estreno limitado en cines. Algo que evidentemente no era lo ideal pero Scorsese aceptó para que la película se convirtiera en realidad.

"La gente comenta que solo mostramos esta película en cines durante cuatro semanas", señaló Scorsese. "Intentamos obtener más, pero los propietarios de los cines y Netflix no pudieron llegar a un acuerdo. Pero ya sabes, he tenido películas que se muestran solo una semana y las sacan. En Estados Unidos The King of Comedy cerró en una semana. Esa película fue ignorada durante 10 años".

En ese sentido, el director de Taxi Driver cree que "estamos en una situación en la que los cines solo muestran las últimas películas de superhéroes. Tienes 12 pantallas y 11 son la película de superhéroes. ¿Te gustan las películas de superhéroes, bien, pero necesitas 11 pantallas? Es una locura para películas como Lady Bird o The Souvenir. Es posible que esas películas no sean necesariamente muy comerciales, pero hay películas que son modestas y genuinas y encuentran una gran audiencia".

Scorsese sostiene que, a su juicio, el problema actual es que películas desechables se han apoderado de la oferta de los cines y como no queda espacio para otras producciones, los estudios no se arriesgan a producir otro tipo de cintas.

"Solo porque una película es comercial, no significa que no puede ser arte", declaró el director. "Los que se consume en los cines es un producto. Un producto que es para ser consumido y desechado. Miren a las películas comerciales como 'Cantando bajo la lluvia'. Las puedes ver una y otra vez. Así que la pregunta es: ¿cómo vamos a proteger la forma de arte?"

Finalmente el director de Goodfellas comentó en el escenario actual hubiese sido imposible desarrollar algunas de sus películas como The Aviator, Shutter Island y The Departed.