Las diferencias entre Marvel Studios y las películas DC presentadas por Warner Bros, se gestan desde la forma en que son desarrolladas y construidas. Mientras en Marvel existe una sola gran figura con la voz y voto final, Kevin Feige, las películas DC no son una división tan independiente y quedan al arbitrio directo del presidente del estudio.
Kevin Tsujihara, quien ya no sigue en su cargo, puso a dos figuras supervisando los proyectos. En su momento, fueron el guionista de cómics Geoff Johns y el productor Jon Berg. Pero la clave es que en DC había más manos en la masa hasta fines del año pasado.
Al mismo tiempo, en Marvel Studios definieron una ruta a seguir mucho más clara tras el estreno de The Avengers, encontrando la forma de explotar sus franquicias para transformarlas en todo un éxito general de crítica y audiencia. En Warner Bros, por el contrario, solo les resultó la jugada con Wonder Woman. El resto de películas no funcionó como hubiese querido el estudio.
En esa línea, un nuevo estudio apunta a que la diferencia en los resultados no están tan relacionados a la calidad o cantidad de películas estrenadas, sino más bien del compromiso emocional de los espectadores con los personajes en la pantalla.
En Adweek explican que el estudio realizado por ZappiStore, una empresa de tecnología de investigación de mercado, utilizó una plataforma de reconocimiento facial y emocional llamada Affectiva para medir la respuesta de los espectadores a una serie de trailers.
A partir de ahí, lograron capturar datos relacionados a la satisfacción general con los trailers y la probabilidad de que los fanáticos lo compartan con otros. Pero lo más importante es que también detectaron que la respuesta a los personajes y el nivel de humor terminó dándole la ventaja a Marvel por sobre su "distinguida competencia".
El estudio también indica que los sujetos respondieron más favorablemente a Marvel en términos de asociación de marca, lo que no es un tema menor para los fans del cómic y pinta mal el camino para una Warner Bros. que tiene bajo su alero a los dos héroes más emblemáticos, Superman y Batman.
Además, los datos de ZappiStore indicaron que la descripción de los héroes en las películas DC no coincide con lo que los lectores están acostumbrados a ver en los cómics, lo que ha sido una queja constante en varias interpretaciones de las películas asociadas al universo DC.
"Nos sorprendió ver, en todos los tráilers probados, que la respuesta emocional fue menor a la esperada para piezas sueltas y efectos especiales, particularmente en el género que estábamos viendo", explicó el arquitecto de investigación de ZappiStore, Ernie Collings.
"Los resultados indican que la forma en que DC ha reiniciado y cambiado a los personajes entre trilogías o las diferencias entre versiones televisivas y cinematográficas, podría estar teniendo un efecto perjudicial sobre qué tan bien se conecta el público con esos personajes", puntualizó Collings.
Es decir, la audiencia en general preferiría sustancia sobre estilo a la hora de presentar a los personajes y, aunque existen fans de los cómics que han manifestado sus críticas al tono de humor del MCU, ese no es un problema para la audiencia general que las ha transformado en hits. Mal que mal, ese elemento los ha llevado a involucrarse más con los personajes, dándole una ventaja importante en los números de recaudación.
Otro tema no menor es el manejo que ha hecho Warner Bros. sobre los personajes en las últimas décadas, ya que nos han dado versiones live-action tan disimiles como Smallvile y Batman v. Superman o dos Flash al mismo tiempo.
Obviamente este estudio solo es un reflejo de la fuerza tras el dominio de Marvel sobre DC en la venta de entradas, pero lo realmente preocupante sería que los ejecutivos terminen contratando a una compañía de investigación de mercado para definir sus películas.
Pero considerando que en el pasado ya se contrató a una empresa de tráiler para editar una película (Suicide Squad), el temor de que eso suceda tiene sus bases.