¿Recuerdan 6 Underground, la película de Netflix protagonizada por Ryan Reynolds y dirigida por Michael Bay? Bueno, aunque para muchos esa entrega de 2019 pasó sin pena ni gloria, Bay aún sigue pensando en aquella producción debido a un problema legal en Italia.

Según reveló The Warp, actualmente Bay enfrenta cargos por el asesinato de una paloma en el marco del rodaje de 6 Underground en Roma durante 2018.

De acuerdo a los reportes, una paloma mensajera habría muerto durante el rodaje de 6 Underground cuando una carretilla la golpeó en medio de una toma. Aquel incidente habría sido grabado por un individuo anónimo quien posteriormente denunció a Bay ante las autoridades italianas.

Pero Bay sostiene que todo es una mentira y ningún animal habría sido dañado en las filmaciones de esa película.

“Soy un conocido amante de los animales y un gran activista de los animales. Ningún animal involucrado en la producción resultó herido o dañado. O en cualquier otra producción en la que haya trabajado en los últimos 30 años”, dijo el director a The Wrap. “Tenemos evidencia clara en video, una multitud de testigos y oficiales de seguridad que nos exonera de estos reclamos. Y refuta su única foto de paparazzi, lo que da una historia falsa”.

Bay además indicó que tuvo la oportunidad de resolver los cargos pagando una multa, sin embargo, no quiso hacerlo para probar su inocencia.

“Las autoridades italianas me ofrecieron la oportunidad de resolver este asunto pagando una pequeña multa, pero me negué a hacerlo porque no me declararía culpable de haber dañado a un animal”, señaló Bay. “Hay un caso judicial en curso, por lo que no puedo entrar en detalles, pero confío en que prevaleceremos cuando tenga mi día en la corte”.

6 Underground fue producida por Netflix con financiamiento de Skydance, pero ninguna de esas compañías se ha pronunciado sobre este caso. Tengan en cuenta que la Unión Europea tiene una legislación sobre las aves llamada “Directiva de Aves” y uno de sus anexos establece que las actividades que dañen a esos animales, independiente de su status de conservación o protección, pueden ser sancionadas.