Star Wars  puede estar situada hace mucho tiempo y en una galaxia muy muy muy lejana, pero podría inspirar la nueva generación de robots de la NASA.

El ingeniero W. Kris Verdeyen ha pasado años desarrollando a R5, el robot humanoide de la agencia espacial conocido como Valkyrie. Este modelo es un prototipo de los "robots guardianes", diseñados para reemplazar a los astronautas en misiones peligrosas.

De acuerdo a lo recogido por el sitio The Verge, en el artículo Astromechs for NASA, Verdeyen asegura que la Agencia debería trabajar en sus propios Astromechs o droides de reparación. Allí, el ingeniero afirma que la próxima generación de robots guardianes "necesitará las capacidades e inteligencia de R2-D2," pero probablemente "lucirán más como C-3PO, dadas las necesidades actuales de la robótica."

¿Pero por qué estos modelos de ciencia ficción le servirían a las misiones espaciales? Verdeyen asegura que "NASA no tiene las mismas necesidades de reparación en el campo de batalla que la Alianza Rebelde, [pero] Star Wars hizo bien muchas de las funciones de los robots espaciales."

"Los robots espaciales de la NASA necesitarán poder reparar las naves espaciales de forma autónoma, al igual que R2-D2 y BB-8," explica el informe.

Verdeyen añade que los droides de la saga portan una increíble cantidad de herramientas que son útiles y versátiles a la hora de resolver problemas en el mundo creado por George Lucas. En situaciones reales, por ejemplo, sería ventajoso que RD-D2 pudiera soldar rápidamente los circuitos rotos de una nave como lo hace en la franquicia, donde incluso trabaja en medio del combate.

Pero el ingeniero señala que lo más importante es que los droides de Star Wars poseen un conocimiento enciclopédico de la nave en la que trabajan y son lo suficientemente inteligentes para resolver los problemas de manera independiente, sin la necesidad de que un humano los controle. Esa actualmente es una de las mayores limitaciones de los robots desarrollados en la NASA.

Desafortunadamente, la tecnología no ha llegado a un nivel que permita la construcción de un RD-D2, BB-8, C-3PO o K-2SO reales, pero la NASA asegura estar trabajando para poner lo mejor de estos personajes de ciencia ficción al servicio de las misiones espaciales.