De acuerdo a Nintendo, The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom fue descargado de forma pirata un millón de veces previo a su lanzamiento oficial.
Esta información surge a través de una reciente demanda de Nintendo contra el emulador de Nintendo Switch, Yuzu, en donde apuntan que este jugó un rol fundamental en que esto ocurriera.
De esta forma la demanda apunta a Tropic Haze, la entidad que desarrolla Yuzu y en ella señalan que aunque las páginas desde donde se descargaba el juego no dependían del emulador, “muchas de esas webs indicaban que se podía jugar en Yuzu”.
Según agregan, el Patreon de Yuzu duplicó su apoyo durante esta época, argumentando que ayudan a expandir la piratería.
Junto con el perjuicio económico, desde Nintendo apuntan que “muchos fans de The Legend of Zelda estuvieron obligados a evitar las redes sociales para evitar ver spoilers y mantener la sorpresa de jugar al juego”.
De esta forma, Nintendo pide el fin del emulador, así como una compensación económica por las pérdidas.