Nintendo ha ganado la demanda que interpusieron varios padres de familia por el drift que se produce en los Joy-Con tras un tiempo de uso.
Según apunta la demanda un grupo de familias se juntó para emprender acciones legales, y aunque en una primera instancia tuvieron algunos problemas para presentar la acción legal, esta finalmente fue interpuesta, sin embargo, transcurrido el tiempo Nintendo logró ganar la disputa.
Según fue dado a conocer, la demanda fue interpuesta por dos padres de familia, quienes se respaldaron en el acuerdo de licencia de usuario final de Switch. Sin embargo, el caso fue sometido a arbitraje y se llegó a la conclusión de que los hijos, que son los afectados por el problema, no forman parte de ese acuerdo, inclinándose la balanza en favor de la compañía.
Las autoridades de esta forma detallaron “no existe ningún acuerdo entre Nintendo y los menores. Dado que nunca fueron parte del acuerdo ni estuvieron vinculados por su cláusula de arbitraje”, por lo cual estos no tenían derecho a reclamar.
