Con las selfies me pasa lo mismo que a Messi con las finales: es increíble pero no se me dan. Y en una era dominada por los likes, los comentarios en Facebook y la popularidad en sitios como Instagram, no es algo que deba tomarse a la ligera.

Las selfies se han convertido no sólo en autorretratos sino que en forma con la que nos presentamos frente al mundo. Y salir mal en una selfie es, en ese sentido, fallarle a la sociedad en cuanto a ser un individuo que cumpla con lo mínimo para ser aceptado.

Pero a veces el problema no está en nosotros, sino que en la cámara misma y donde creemos ver una fealdad absoluta en realidad hay un mar de likes, guiños y zumbidos que aun no ha sido explorado. Un ejemplo de esto es una investigación publicada en el journal científico Facial Plastic Surgery, en el cual se detectó que las narices aparentan verse un 30% más grandes de lo que son en las selfies que en una foto tomada por otra persona.

Y todo tiene que ver con la perspectiva y la distorsión que genera tener un lente tan cerca de nuestras caras. El mismo estudio señala que el 55% de los cirujanos de Estados Unidos declaró haber recibido al menos un paciente que busca operarse solo para verse mejor en sus fotos.

Pero la pregunta que cabe hacerse es ¿Habrá una forma de poder aprovechar esa distorsión de las cámaras a nuestro favor?

Para ello, me comuniqué con Lorena Miki, experta en el arte de las selfies, para conseguir los mejores tips para ver si realmente es posible arreglar mi problema con estas cámaras. En el mejor de los casos, podría obtener resultados como este:

Y en el peor de los casos... bueno, están a punto de ver exactamente cuál es el peor de los casos.

Paso 1: El ángulo perfecto

El arte de la selfie tiene mucho de ensayo y error, y para muchos de nosotros, más de errores que de ensayos. Según Lorena Miki, el primer paso que debe seguirse es tomar el celular y probar con tu mejor ángulo. "Mírate desde arriba, la derecha, la izquierda y desde abajo, pero no tan abajo y ahí analizar cual es tu mejor ángulo". La mayoría de las veces será al igual que aquel comercial de antaño: arriba y cruzado, pero no siempre es así. Los ángulos exagerados también tienden a cambiar nuestros rostros, así como también que tan cerca o lejos estemos de la cámara. Encontrar tu ángulo es algo que cuesta, pero una vez que lo haces, simplemente debes guardarlo en tu memoria muscular.

Así que lo primero que hice fue probar ángulos. Primero, el frontal:

Mirando a la izquierda

A la derecha

Desde abajo

Y la foto Pokemona

Pero finalmente mi mejor ángulo es este: el ángulo ausente

Paso 2: Busca una expresión

Cuando ya conozcas tu ángulo, es hora de ponerle algo de expresión a tu cara y esto dependerá mucho de como quieras salir, pero también de qué tan expresivo seas. "Prueba si te ves mejor sonriendo, serio o siendo coqueto para la cámara, prueba con distintas expresiones", dice la experta en llenar su Instagram de estas imágenes. Yo no soy muy dado a las expresiones, pero creo que lo intentaré.

Acá estoy serio.

Sonriendo

Triste

Con cara de YouTuber

Y coqueteando (sí, esta es mi cara de coqueteo)

Paso 3: La iluminación

Fotografía, por si no lo sabían viene de foto, que significa luz y grafía, que significa escritura. Por lo que tener una mala iluminación es el equivalente a escribir con un lápiz con la punta rota o con la tinta a medio acabarse. El tipo de luz que debes buscar siempre es la luz natural o cualquiera que la imite. Acercarse a una ventana será siempre mejor que estar al lado de la pantalla de un computador, por mucho sacrificio que signifique moverse. Lorena también tiene algo que decir con respecto al flash, el cual puede ser nuestro mejor aliado o a veces, nuestro enemigo.

"La luz pareja siempre te favorecerá. Por eso si es un flash tradicional no te hace ningún favor porque te marca los rasgos. Pero si es un flash causado por una pantalla iluminada en blanco, es lo mejor porque te empareja el rostro.

En mi caso, claramente no pasó mucho.

Paso 4: Los filtros

¿Es usar filtros hacer trampa en el mundo de las selfies? Depende de la cantidad que utilices. "Puedes aplicar nivel de belleza o algún filtro pero sin exagerar", dice la experta. Y en algo tiene razón, ya que en mundo de los filtros es muy fácil exagerar, sobre todo cuando hablamos del modo belleza. Acá pondremos un ejemplo (aunque no se note mucho) de un antes y un después.

Sin Carozzi:

Con Carozzi:

La cantidad de cambios y blanqueamiento que me hizo el famoso modo belleza me hizo darme cuenta de que en realidad, la mejor fórmula para estar satisfecho con tus selfies es no esperar mucho.

Si ni con los consejos de una experta logré verme como el imán de likes que a todos nos gustaría ser, la mejor conclusión que saqué de todo esto es que las técnicas pueden servir para arreglar un poco tu rostro, pero nunca harán milagros. Y si, tal como yo, no tuviste la suerte de nacer con una cara de selfie, lo importante es no desanimarse. Porque cuando no te importa lo que diga el resto, todas las selfies son perfectas.