Mientras el brote de coronavirus afecta a gran parte del mundo, dos grandes ciudades estadounidenses, Nueva York y Los Ángeles, han ordenado el cierre de todos los cines.
Esta medida sigue la cancelación de la mayoría de los estrenos de esta temporada, entre las que destacan No Time To Die, A Quiet Place II, Mulán y The New Mutants. Además, la mayoría de las producciones de Disney fueron pausadas por el brote.
Por otro lado, las películas que ya se encontraban en cartelera, como Unidos de Pixar y Bloodshot, la última entrega de Vin Disiel, han visto como su recaudación de desploma ante las bajas asistencias a los cines.
Debido a que ya la mayoría de los ciudadanos de ambas localidades se encuentran en cuarentena, como medida de precaución ante el contagio del coronavirus, ambas alcaldías decidieron cerrar los establecimientos de cine para no poner en riesgo ni a sus trabajadores ni a personas que aún así quieran asistir,
El gobierno estadounidense ha hecho el llamado de evitar conglomeraciones de 50 personas o más, lo cual ha representado un desafío en el transporte público e, inmediatamente, hace que las personas eviten asistir a las salas de cine.
En un hilo de Twitter, el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, afirmó que "nuestras vidas están cambiando de formas inimaginables hace unas semanas. Estamos tomando una serie de acciones que nunca hubiéramos tomado si no fuera un esfuerzo para salvar vidas".
https://twitter.com/NYCMayor/status/1239372361905905666
Los cierres serán efectivos a partir del martes 17 de marzo y permanecerán así hasta el 31 de marzo o hasta nuevo aviso por parte de las autoridades locales, quienes se han comprometido a evaluar la situación periódicamente. En tanto, es imposible evaluar en su totalidad cómo el coronavirus ha afectado la industria del entretenimiento, sin embargo, la cancelación de grandes estrenos y la baja asistencia al cine entregan una noción de los estragos del brote.
Asimismo, la contingencia generada por el COVID-19 ha afectado a gran parte de las industrias, incluyendo a la tecnología, los videojuegos, el deporte y el turismo. Sólo queda esperar el fin de la cuarentena para conocer los efectos reales del coronavirus en estos mercados.
Vía IndieWire