Algunos afiches de Once Upon a Time in Hollywood ubicados en Los Ángeles, Estados Unidos, fueron intervenidos como parte de una protesta contra figuras de la industria del entretenimiento que han sido acusadas de abuso a menores.
Según informa The Hollywood Reporter, esta acción fue obra de un individuo denominado Sabo e implicó desde carteles ubicados en altura hasta afiches en paradas de autobuses que promovían la nueva película de Quentin Tarantino.
Por ejemplo, uno de los anuncios intervenidos ahora luce los rostros de Jeffrey Epstein y Roman Polanski en lugar de los protagonistas de la película Leonardo DiCaprio y Brad Pitt. Además, el cartel muestra una versión alterada del título de la producción que vincula a Hollywood y la pedofilia con la frase "Once Upon a Time in Pedowood".
Mientras que otra promoción de la película dispuesta en una banca hace lo mismo pero ubicando a Woody Allen en el lugar del personaje de Pitt.
De acuerdo a THR, Sabo dice que "los anuncios falsos están destinados a insultar a la industria del entretenimiento por abrazar a Polanski, quien se declaró culpable de tener relaciones sexuales con un menor hace cuatro décadas y, (apoyar) en menor medida a Epstein, quien fue arrestado el 6 de julio por tráfico sexual de menores".
Woody Allen, quien también es incluido en estos afiches, fue acusado de abusar de su hija adoptiva cuando ella tenía 7 años.
"Sentí que todos deberían compartir una valla publicitaria para resaltar un problema que ha plagado a Hollywood durante décadas: el abuso de niños", dijo Sabo, quien además habría apuntado a la película de Tarantino por su ambientación durante los crímenes de Charles Manson.
Once Upon a Time in Hollywood ya se estrenó en Estados Unidos, pero en países como Chile recién debutará en agosto.