James Gunn es uno de los directores más conocidos de la actual etapa de producciones de superhéroes. Después de todo, el cineasta ha escrito y comandado películas como Guardianes de la Galaxia, Guardianes de la Galaxia Vol 2, The Suicide Squad y pronto presentará a una serie de Peacemaker, además de la tercera película y un especial de Navidad del equipo espacial de Marvel Studios.
Pero pese a toda su carga laboral, actualmente Gunn siente que el futuro de las producciones de superhéroes está en peligro.
En el marco de una entrevista con The Irish Times, el director señaló que está aburrido con el panorama actual de la cintas de superhéroes y siente que se están acercando al nivel de saturación que terminó por sepultar a los westerns.
“Sabemos que pasó con las películas de vaqueros y qué pasó con las películas de guerra”, dijo Gunn. “No lo sé, creo que no tienes que ser un genio para sumar dos más dos y ver que hay un ciclo para ese tipo de películas y que la única esperanza para el futuro del cómic y las películas de superhéroes es cambiarlas. Son realmente tontas. Y son sobre todo aburridas para mí en este momento”.
Gunn obviamente no individualizó a las producciones que lo han decepcionado, pero continuó explicando qué fue lo que motivó su interés en este tipo de películas.
“Las amé al principio. Estaba muy emocionado cuando empezaron a hacer esas películas. Se trataba de los efectos visuales cuando vi a Superman cuando era niño. Todavía amo esa película. Está bien, lo sé, es un tipo con cables y pantalla azul con este tipo de efectos visuales horribles”, dijo Gunn. “Y luego, cuando salió Iron Man, yo estaba dentro. Puedes hacer volar a un tipo que parece un tipo que vuela por ahí. Y eso fue algo hermoso de poder hacer. Pero si las películas no cambian, se volverá muy, muy aburrido”.
En ese sentido, Gunn planteó que a él le gusta tomar inspiración de un clásico cómic: Watchmen. Todo con el fin de darle frescura a un género que es muy popular, pero que obviamente no es infalible.
“Siempre me influenció el arte de Dave Gibbons y el Watchmen de Alan Moore, donde el vestuario no encajaba perfectamente con los superhéroes y tenían un poco de barriga”, dijo Gunn. “No todos eran cuerpos perfectos, no todos eran hermosos. Cuando peleaban, se estaban metiendo en la estúpida cosa de Bartleby de meterse en peleas de bar. Hay personas que intentan hacer cosas diferentes con superhéroes. Entonces, no es una regla al 100% que no todos lo sean, pero muchas películas de superhéroes son aburridas. Entonces, para mí, creo que solo se trata de incorporar otros elementos”.
Debido a la pandemia y las distintas apuestas para los servicios de streaming, durante los próximos años los fanáticos recibirán varias producciones de superhéroes anualmente tanto por parte de Marvel Studios y Sony como por parte de DC. En ese sentido, tendremos que esperar para ver si estos proyectos son lo suficientemente distintos entre sí para lograr mantener cautiva a la audiencia.