Al parecer, la WWE ya siente la inminente amenaza de su nueva y más potente competencia: la All Elite Wrestling, una nueva empresa que comenzará sus shows semanales en TNT a partir del segundo semestre y que logró convocar a algunos de los luchadores más talentosos del mundo, como Kenny Omega, el legendario Chris Jericho y The Young Bucks.

Con los índices de audiencia de sus programas estacandos, muy por debajo de los estándares que esperan, una caída de público asistentes a sus eventos y las críticas centradas en el aspecto creativo de su programación, ahora la compañía de Vince McMahon tomó una decisión clave: recuperar a las mentes creativas de Paul Heyman y Eric Bischoff.

Heyman, quien en los últimos años solo tenía un trato como manager de Brock Lesnar, fue el histórico creador de la ECW y también fue el encargado de la mejor época del programa Smackdown, cuando nombres como el propio Lesnar, Kurt Angle, Edge, Rey Mysterio, Chris Benoit y Eddie Guerrero entregaron un show espectacular. Ahora con toda su experiencia volverá a tener control creativo de un programa de la WWE, algo que no sucedía desde la malograda resurección de la ECW a mediados de la década pasada. Lo más importante de todo es que se hará cargo del buque insignia que es RAW.

Por su parte, Bischoff, el hombre que hizo tambalear el suelo de Vince McMahon en los noventas al convertir a la WCW en la empresa de lucha libre más importante del mundo, volverá a la WWE. Pero si antes solo tuvo un rol como personaje en pantalla, siendo en una época el Gerente General de RAW, ahora tendrá voz y voto a en la labor de tomar las riendas del programa Smackdown. Una decisión no menor considerando que próximamente tendrá una nueva casa televisiva en Estados Unidos.

Ambos tendrán el cargo de "Directores Ejecutivos" y reportarán directamente a Vince McMahon, por lo que a su cargo estará el equipo creativo de guionistas. Sin embargo, entre los especialistas, el principal punto será si ambos lograrán tener la última palabra.