Desde hace unos años, un grupo de emprendedores chilenos ha liderado una de las grandes revoluciones en el mercado de las bicicletas, no solo en Chile sino que alrededor del mundo. Se trata de Yerka, la primera bicicleta que se define como anti robo por diseño.

La gracia de Yerka es que su propio cuerpo es desmontable y se convierte en un candado capaz de dejarla asegurada en cualquier sitio, y si un ladrón intenta llevársela con los métodos tradicionales que involucran la fuerza bruta, se quedará con un pedazo de chatarra que no se puede usar.

https://www.youtube.com/watch?v=FtjQMJzKgSA

Y cuando los creadores del sistema tuvieron la oportunidad de mostrar como funcionaba al presidente de la República, Sebastián Piñera, las expectativas eran altas. Sabiendo que una de las prioridades del gobernante es la lucha contra la delincuencia, una bicicleta a prueba de robos suena como el producto ideal para su afán de acabar con la inseguridad en las calles.

Lo que nunca imaginó el equipo detrás de este invento, es que con una agilidad sorprendente, Piñera demostraría que la bicicleta efectivamente si se puede robar, y lo demostró en vivo y en directo, en un hecho que por suerte, quedó documentado en el siguiente video:

https://twitter.com/Papihuesos/status/993476389205676033

Llama la atención como Piñera no solo demuestra como sacar la bicicleta, sino que incluso se da el tiempo de responder cómo lo haría para llevársela sin sillín hasta su casa y allí, tranquilamente, resolver el problema mayor.

Imaginamos que con tanto tiempo dedicado a la lucha contra el delito, el presidente Piñera se ha puesto en la obligación de ponerse en el lugar de los hampones y por eso ha desarrollado ese instinto para romper las reglas, que deja tareas por hacer al equipo de Yerka.

Porque si de verdad vamos a ponernos a luchar contra la delincuencia, hay que ponerse en todos los escenarios.