Esta semana se publicó una nueva foto de Ant-Man and The Wasp, en la que finalmente se veía por fin al personaje de Evangeline Lilly usando el traje de The Wasp, más conocida por estas latitudes como La Avispa.

Inmediatamente en la red repararon en la referencia a los respectivos bichos que tendían los tarjes de Pym y Lang. Y otros vieron una forma fálica en el traje de la heroína.

Esto revela, no solo que los fans tienen mucho tiempo libre, sino que Hollywood aún no sabe que hacer con los senos en las armaduras.

Generalmente los trajes de heroínas y guerreras en el cine y la TV crean un diseño muy elaborado en busto, pero que no cumple ninguna función lógica en batalla. Más bien suman peso o dejan al descubierto un sector vulnerable.

No se trata de la apariencia, sino la efectividad en batalla que "en la realidad" tendría un traje así. Es un elemento de verosimilitud.

Por ejemplo, Lady Sif en las primeras dos entregas de Thor luce dos tipos de armaduras, ambas simulan un escote dejando su pecho descubierto del metal por alguna razón. Esperemos que la causa de su desaparición en Thor: Ragnarok  haya sido que murió por culpa de su mal equipamiento para el combate.

También en la franquicia del dios del Trueno, Valkyrie,  interpretada por Tessa Thompson parte con una armadura bastante genial y funcional en Saakar. Sin embargo, el traje que usa para la batalla en Asgard, tiene un gran sostén externo dorado que podría poner en riesgo su vida contra alguien que crea armas de la nada como la diosa de la muerte. La utilidad de es ítem es un misterio, al igual que los calzoncillos rojos que Superman ocupaba fuera de su traje. Pero al menos ese es un clásico.

Pese a que esto no minimiza su calidad de guerreras, sería más lógico que las armaduras por lo menos aparentaran cumplir su función.

Ahí está, por ejemplo, la utilizada por Brienne of Tarth en Game of Thrones.

La guerrera interpretada por Gwendoline Christie, a menudo es víctima de bromas por su apariencia masculina, pero en su traje ha sido capaz de combatir  y derrotar a los mejores luchadores de Westeros.

Tampoco todas las armaduras deberían ser como la de Brienne, más bien deben servir un propósito al personaje y su historia sin dejarlo vulnerable además de acomodar a la actriz.

En Wonder Woman por ejemplo, la armadura utilizada por las amazonas protegía en gran parte sus órganos vitales, y era coherente con la historia de ellas.

Pero el cambio de vestuario que tuvieron en Justice League no tenía ningún sentido para una batalla, para la que se suponía estaban preparadas.

Nunca dejarían a Thor luchar con una armadura que protegiera solo su pecho y dejara vulnerable su abdomen, porque es un buen atributo. Nadie lo niega. De hecho, el traje del dios del trueno es completamente funcional y a la vez resalta el físico de Hemsworth.

No es tan difícil hacer lo mismo con sus personajes femeninos.