Desde Remedy Entertainment se han referido al próximo remake de Max Payne 1 y 2, apuntando que es un gran proyecto y que no es sencillo de realizar pese a tratarse de un remake.
Fue Sam Lake, director creativo del estudio, quien se refirió al proyecto en una reciente entrevista con VGC mencionando que “Es una tarea importante en el sentido de que incluso siendo antiguos, piensa que supone llevarlos a un estándar moderno y combinar ambos en uno, puedes ver que es un proyecto grande”.
Cabe recordar que por el momento este remake, que utilizará la tecnología Northlight, que vimos en Control y Quantum Break, no tiene fecha de lanzamiento, y parece que aún habrá que esperar un tiempo para su llegada, sobre todo si es que tenemos en cuenta que otro juego del estudio, Alan Wake 2, llega en un mes.
Remedy vendió los derechos de Max Payne a Take-Two en 2002, lo que llevó al lanzamiento de Max Payne 3 en 2012. Sin embargo, recientemente ambas compañías alcanzaron un acuerdo con el fin de traer de regreso la licencia.