Review | Contra: Operation Galuga, el regreso de un clásico que juega a la segura

1

La franquicia vuelve a la vida con una reinvención del juego original que entrega nuevos gráficos y más diálogos de historia, pero que no busca reinventar los disparos de ningún modo.


Sin duda que Contra implica un viaje de inmediato a los tiempos iniciales de las consolas, con aquél título de arcade que fue adaptado a múltiples plataformas hogareñas, incluyendo una versión de la primera Nintendo que marcó la niñez de muchos.

Tomando clara inspiración en los máximos héroes de acción ochenteros, con protagonistas inspirados en Schwarzenegger y Stallone, la tarea de avanzar sin parar por plataformas, esquivar los múltiples disparos y hacerse de tu arma favorita hasta llegar al final de cada nivel se transformó en una experiencia que posteriormente fue replicada por cientos de clones y que solo un puñado de títulos logró mejorar, incluyendo a los soldados de Metal Slug y los dibujos animados de Cuphead.

Ahora, alrededor de cinco años después del regreso de la franquicia con Contra: Rogue Corps, que a su vez era una secuela del celebrado Contra III: The Alien Wars, en la compañía Konami decidieron volver al origen para reimaginar el título original de 1987.

El videojuego en cuestión es Contra: Operation Galuga, un título desarrollado por el estudio WayForward, quienes ya han trabajado en esta franquicia, entregando una capa moderna al juego clásico, incluyendo la vorágine de acción y disparos que se podría esperar de una propuesta como esta. Claro que ese escenario, este videojuego no tiene mayor interés en reinventar las cosas.

1

Como Contra: Operation Galuga no es un juego que no busca reinventar la rueda de ningún modo, inevitablemente su propuesta queda más como una carta nostálgica para todos aquellos que han jugado con la franquicia de Contra en el pasado. Obviamente este nuevo título no le hace el quite a las nuevas generaciones, pero su formula no representa el mayor de los desafíos al seguir el esquema clásico de iniciar un nivel, avanzar matando enemigos y llegar hasta la meta final: derrotar al jefe de cada sector.

En ese sentido, todos los jugadores viejos de Contra reconocerán los parajes conocidos de la isla que debe ser librada de los enemigos a punta de balazo, incluyendo los encuentros cercanos del tercer tipo, pero al menos en esta dinámica de gráficas modernizadas y recorrido familiar también incluyen nuevos personajes, un montón de diálogos para explicar la misión que está en juego y algunos niveles extra que buscan justificar la reinvención para no quedarse como un mero calco.

Su propuesta de vieja escuela en definitiva logra cumplir con lo esperado, por lo que este no es un videojuego de Contra que quede al debe, especialmente en lo que concierne a la experiencia tipo Comando y Rambo 2 de matar a todo lo que se nos cruce por delante, pero a 35 años del lanzamiento del original, habría sido mejor que la reinvención fuese más profunda y jugase con nuevos elementos de gameplay. Especialmente a la hora de volver al desafío algo más atractivo.

Pero la receta de Contra aquí no tiene nuevos condimentos y tenemos ese viejo y conocido recorrido 2D en plataformas. Más aún, cosas como el uso de una segunda arma ya habían sido explorados en juegos anteriores, al igual que algunos modos extra de desafío, por lo que solo queda remarcar que la propuesta de Contra: Operation Galuga termina jugando completamente a la segura. No hay nada de malo en aquello, pero de todas formas da pie a que este videojuego pase desapercibido o, simplemente, se te olvide rápido.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.