Dragon Ball es una saga tan popular que cada cierto tiempo es que llega un nuevo juego basado en la franquicia creada por Akira Toriyama, en este contexto es que recientemente se lanzó Dragon Ball: The Breakers un multijugador asimétrico, el cual deja de lado las clásicas fórmulas de la franquicia intentando innovar en la jugabilidad pero no logrando convencer tanto por su jugabilidad como sus gráficos.
El juego de esta forma nos pone frente a una historia inventada en la cual un grupo de jugadores toman el rol de simples humanos en el mundo de Dragon Ball y deben luchar por sobrevivir del ataque de diferentes villanos como Freezer, Majin Buu y Cell.
Dado que tomamos el control de un simple humano, es que podemos crear a nuestro personaje tomando como base una serie de características tanto originales como basadas en los diferentes personajes y que aunque permite personalizar elementos como el pelo, ojos y tamaño, no deja de sentirse que nuestro personaje es un tanto “genérico” frente a los protagonistas de la aclamada serie por más que ocupemos su cabello o vestimenta.
A pesar de ser sólo multijugador el juego presenta una historia, la cual sirve para darle un contexto al juego y donde nos encontramos con Trunks, con quien nos vemos envueltos en una aventura que involucra grietas de espacio tiempo y donde tendremos que viajar a cada una de estas para arreglar paradojas y evitar que los villanos causen más estragos.
De esta forma, el juego presenta partidas de ocho jugadores, en donde siete sobrevivientes buscan la forma de detener al villano, controlado por otro jugador. Para hacerse con la victoria, en cada partida los jugadores sobrevivientes deben buscar una serie de llaves de poder, las cuales activarán una máquina que evitará que el villano destruya el lugar. Para esto tendremos que recorrer el mapa a máxima velocidad mientras el villano hace lo propio para acabar con cada uno de los sobrevivientes.
La idea en su génesis no es mala pero la implementación de jugador asimétrico nunca es fácil, así lo han demostrado la variada cantidad de proyectos fallidos que ha tenido este género. En este caso aunque el juego tiene algunos destellos y en momentos logra divertir, no se encuentra del todo bien aplicado y es que mientras buscamos las llaves -para lo cual debemos abrir cofres y romper cajas- la jugabilidad no se siente agradable al momento de apuntar, disparar o usar los diferentes objetos que vamos encontrando.
Todo se vuelve peor al momento de utilizar las cápsulas de transformación, con las cuales te puedes convertir en un personaje de Dragon Ball y combatir con el villano pero con un sistema que queda muy por detrás de todo lo que se ha visto en la franquicia a lo largo de los años. Aunque estos combates no son el foco de este juego, el hecho de que un juego de Dragon Ball tenga un mal sistema de combate ya le quita demasiados puntos.
Cabe mencionar que la jugabilidad no se reduce sólo a buscar llaves, esconder y transformarse en un guerrero, ya que a lo largo del mapa también se pueden encontrar diferentes herramientas que nos ayudan a cumplir con nuestra misión como radares para encontrar las esferas del dragón o lanzacohetes, todos elementos que hacen que cada partída se sienta diferente.
Junto con esto, no todos los encuentros tendrán la misma conclusión, ya que el juego va mucho más allá de ganar y perder ya que si el villano destruye algunos de los lugares se puede escapar con vida del lugar sin lograr el objetivo o incluso derrotar al villano en combate.
Hay que mencionar que la jugabilidad no acompaña de buena forma al título y se siente como si no estuviera del todo pulida con problemas bastante claros. A pesar de esto, el juego -y por sobre todo al jugar con amigos- es que muestra pequeños destellos dando a entender que la idea no era del todo mala pero la ejecución no fue la mejor.
Otra cosa que pasa con este juego, es que se siente que fue hecho para obtener dinero con un sistema de micro-transacciones que permiten obtener nuevos personajes para transformarnos, vestimentas, entre otros, todo lo cual funciona con un sistema ‘gacha’ donde gastamos puntos sin saber qué es lo que obtendremos.
En conclusión…
Dragon Ball: The Breakers es un juego que planteaba una buena y atractiva idea pero que lamentablemente fue mal ejecutada, es un juego que en momentos tiene destellos que hacen que pueda resultar divertido, pero en grandes términos no fue acompañado de buena forma por su jugabilidad, la cual deja mucho que desear.