Al comienzo del universo de Marvel Studios, la compañía liderada por Kevin Feige concretó una serie de cortometrajes llamados Marvel One-Shot que rara vez lograron justificarse más allá de su condición de contenido especial para Blu-Rays. Luego de los mockumentales del Team Thor, no mucho más se hizo para relajarse un poco con el canon seriado y contar historias auto-contenidas del universo de superhéroes, pero eso ahora finalmente cambia gracias a la existencia del servicio de streaming Disney+.
Con el extenso nombre de Una Presentación Especial de Marvel Studios: Guardianes de la Galaxia: Especial de las Fiestas, el director James Gunn concretó precisamente lo que su nombre indica: una historia corta centrada en el equipo cósmico de héroes, la cual sigue la tradición de las películas navideñas que año a año llegan a nuestras pantallas.
Pero ahora, tomando lo que han sido las historias del equipo liderado por Star-Lord (Chris Pratt), este especial es una historia plagada de comedia y elementos absurdos, como el hecho de que un par de héroes intenten salvar la Navidad buscando a Kevin Bacon, pero que no olvida los elementos meláncolicos que marcan a este equipo de inadaptados y perdedores que han logrado surgir, en todo sentido, al apoyarse en sus camaradas.
Considerando que ese es justamente el tipo de contenido que es completamente apropiado para contar una buena historia de Navidad, y el propio trabajo previo de James Gunn con estos personajes, en esta propuesta también queda claro el cariño y la empatía que el realizador tiene por este peculiar grupo de personajes que contrasta con las personalidades que marcan a todo el resto de producciones de Marvel Studios.
De ahí que ese sentir afectuoso es catapultado hacia adelante en cada escena para abordar el costo emocional que cada uno de estos héroes ha tenido que enfrentar, lo que es especialmente relevante ante el hecho de que Gamora ya no está entre sus filas tras los sucesos de las últimas películas de Los Vengadores. Aquello también remarca que la pérdida y la soledad es parte del ADN del equipo, pero también lo son los propios lazos que han logrado forjar en medio de ese entramado agridulce.
Sin entrar en muchos detalles, James Gunn plaga a este especial de todos los elementos bobos que se esperan de las interacciones entre los Guardianes, lo que solo se pone aún más absurdo cuando todos los extraterrestres intentan comprender el concepto de Navidad que marca a las celebraciones terrícolas. Pero como suele suceder en el cine de Gunn, lo burdo inevitablemente da pie a algo muy conmovedor. Es decir, nuevamente aparece su marca registrada, tal y como sucedió en el cierre de la historia de Yondu en Los Guardianes de la Galaxia volumen 2 o la secuencia de las ratas devorándose a un Starro que remarca que era feliz mirando a las estrellas en The Suicide Squad.
Con una secuencia animada inicial, en la que Kraglin (Sean Gunn) rememora una historia sobre el momento en el que Yondu arruinó la Navidad de un joven Peter, el especial básicamente funciona como una historia centrada en Drax the Destroyer (Dave Bautista) y Mantis (Pom Klementieff). quienes viajan a La Tierra, tienen múltiples problemas debido a que no están habituados a las costumbres terrícolas y buscan concretar un solo gran objetivo: dar con Kevin Bacon, el héroe más genial del universo. El mismo que salvó a un pueblo a punta de baile.
Dejando de lado a las grandes secuencias de efectos especiales, por lo que personajes como Groot (Vin Diesel) y Rocket (Bradley Cooper) están en un segundo plano en esta ocasión, el especial se compone de una seguidilla de secuencias divertidas que sacan partido al deseo de James Gunn por contar una especie de alocado spin-off de Drax y Mantis, incluyendo una secuencia de tomatera en un bar. Al mismo, también tiempo sirve para impulsar a temáticas navideñas como la soledad para reforzar los lazos de esta extraña familia galáctica que han logrado conformar. Y una vez que aparece Kevin Bacon, también se da pie a bastante comedia absurda debido a que el actor no tiene idea que está en la mira de un secuestro intergaláctico por parte de dos idiotas.
Siendo esta una obra de James Gunn, la música también cobra especial importancia, incluyendo un notable tema musical desentendiendo a la Navidad, el cual fue creado especialmente para la película por la banda Old ‘97s, caracterizada completamente de extraterrestres. Pero aunque la selección musical sigue siendo tan buena como suele suceder en las películas del director, de todas formas lo que más cobra importancia es el hecho de que el cúmulo de decisiones acertadas terminan transforman a esta producción en una pieza que acompaña a la perfección a los volúmenes anteriores de Los Guardianes de la Galaxia.
Es decir, mientras Drax se burla de gran forma de los actores una vez que conoce la verdadera profesión de Kevin Bacon, la inclusión del actor termina siendo clave no solo para que Peter recupere el espíritu navideño, sino que para entender que la nostalgia por Footloose está emparentada con las alegrías que pueden entregar las películas. Y son ese tipo de elementos los que terminan dándole aún más valor a la resolución de este especial que tiene la misma duración que la de un capítulo de una serie de televisión.
Pero no está de más terminar remarcando que esos 45 minutos bastan y sobran para entender que Gunn abrazó los elementos de las películas navideñas para potenciar la alegría y la melancolía tan arraigados en las propias películas de los Guardianes. Y en ese sentido, el especial también es un excelente tentempié para lo que será su última película del equipo, que de seguro solo reforzará ese tipo de aspectos en su despedida del MCU.
Guardianes de la Galaxia: Especial de las Fiestas se estrena este 25 de noviembre en Disney Plus.