Una de las sorpresas que dejó la pasada edición de The Game Awards fue el lanzamiento de Echoes of the Fallen, el primer DLC de pago de Final Fantasy XVI, juego exclusivo de PlayStation 5. Durante los últimos días hemos estado probando este DLC el cual nos permite explorar un poco más de la historia de Valisthea, el continente donde se desarrolla el juego y nos presenta una nueva aventura que resulta un tanto breve pero suma uno de los combates más desafiantes del juego.
La historia nos sitúa justo antes del combate final, tras haber destruido todos los cristales madre ubicados en los diferentes rincones de Valisthea. Es aquí cuando Clive y sus compañeros comienzan a recibir información de la existencia de un posible nuevo Cristal Madre, el cual ha permanecido oculto a lo largo de los años. Clive, Jill y Joshua, deciden investigar la situación lo que los lleva hasta la Torre de los sabios, una enorme estructura que pertenece a una avanzada civilización que cayó en desgracia y desapareció cientos de años antes de los sucesos del juego. Lo primero que hay que mencionar de la historia es que para jugarla tendremos que haber llegado casi al final del juego, por lo que si no lo has terminado o lo dejaste a la mitad no podrás disfrutarlo de forma inmediata. Si ya lo acabaste es que tendrás que tener completadas una serie de misiones secundarias para desbloquear este DLC que se puede convertir en un atractivo desafío.
Algo que hay que señalar es que la historia aunque resulta atractiva no termina de llamar por completo la atención, siendo la parte más llamativa el combate con el jefe final que llevará a que utilices de buena forma todos los recursos que has obtenido a lo largo del juego. La historia aunque es dirigida por Clive, Jill y Joshua presenta nuevos personajes que realmente no terminan de resultar atractivos y se vuelven un mero relleno para contextualizar lo que está ocurriendo.
Como es de esperar junto con este DLC es que llega nuevo equipamiento, el cual es bastante fácil de obtener a medida que vamos avanzando, por lo que se siente un tanto simple su obtención y en cierta medida ausente de desafío, sobre todo si tenemos en cuenta que la torre que visitamos la debemos completar de una tirada, subiendo por los diferentes niveles y acabando con los enemigos hasta llegar a enfrentar al jefe final. Acá hay que mencionar que el modo historia con este DLC subirá el nivel máximo hasta 55, mientras que en el modo Final Fantasy, el modo de mayor dificultad, nos presenta un aumento de nivel hasta 105.
Los enemigos de esta forma rondan entre estos niveles y aunque en gran medida se mantienen, en lo que respecta a dificultad, similar a lo que es el juego base, todo cambia cuando llegamos al jefe final, Omega. Lo primero que hay que mencionar es que Omega es un jefe secreto recurrente de la saga Final Fantasy, el cual tuvo su primera aparición en Final Fantasy V y recientemente lo pudimos ver en entregas como Final Fantasy XIV y Final Fantasy XV. Tal como había ocurrido con el juego base, que tomaba ciertos elementos del combate contra jefes de Final Fantasy XIV Online, el combate contra Omega se sentirá como una de estas batallas, con una serie de pilares, donde el posicionamiento y el buen uso de las habilidades será necesario.
Si has jugado Final Fantasy XIV Online y puntualmente el contenido Savage (contenido de mayor dificultad), déjame decirte que esto se asemeja bastante, con el enemigo lanzado diferentes habilidades que nos obligarán a movernos de forma precisa a la vez que optimizamos el daño que le infringimos de la mejor manera. Aunque el combate representa un desafío en sus diferentes etapas se ve mermado por las facilidades que entrega Final Fantasy XVI, me refiero puntualmente el hecho de que al morir reapareces en cierto punto del combate y con el máximo de pociones, con lo cual lo que pudo ser un verdadero desafío que te obligara a dominar a la perfección las diferentes etapas se vuelve mucho más simple.
De todas formas hay que destacar este combate, el más desafiante que ha tenido el juego hasta la fecha y que se disfruta por sobre todo en el modo Final Fantasy, y es que las diferentes etapas y combinaciones de ataques que realiza Omega te obligarán a estar atento en todo momento y poner en práctica todo lo aprendido. Otro punto alto del combate, es la música que posee, la cual cuenta con elementos de ‘eScape’, el tema de Omega en Final Fantasy XIV.
Finalmente, quizás lo más atractivo que deja este DLC es las ganas de tener más contenido de mayor dificultad y es que el juego base dentro de todo resultaba bastante fácil con todos los elementos que entregaba. Con todo esto, este primer contenido descargable aumenta las expectativas de cara al próximo DLC, The Rising Tide, el cual se centrará en el Eikon perdido, Leviathan, el cual esperamos que ofrezca un combate igual o más desafiante que el de Omega.
En conclusión...
Final Fantasy XVI: Echoes of the Fallen es un atractivo DLC con un destacado combate final. La historia aunque resulta atractiva y sirve para profundizar un poco más en el mundo presentado por el juego, se siente que pudo ser mucho mejor y un poco más desarrollada. De todas, el DLC marca un precedente de lo atractivo y desafiante que puede llegar a ser la jugabilidad del título.
*Final Fantasy XVI: Echoes of the Fallen se encuentra disponible por 9.99 dólares en la PlayStation Store.