Review | El Huawei P30 Pro es la nueva cámara a vencer
La compañía asiática vuelve a sorprender con un teléfono que apuesta todo por la imagen, aun cuando esto signifique renunciar a otros avances.
El año 2016, una pujante compañía de teléfonos celulares llamada Huawei, presentaba ante el mundo uno de sus proyectos más ambiciosos. En coingeniería con la mítica compañía de fotos Leica, el gigante asiático presentó al mercado el Huawei P9, un teléfono que lucía un enigmático pero poderoso par de lentes que luego se convirtieron en el estándar de la industria.
Con el pasar de los años, esta alianza convirtió a la línea P de la marca en un sinónimo de buenas fotografías, en la era en donde la imagen es la que manda, sobre todo en Internet. Pasaron luego el P10, el P20 y ahora es el turno del Huawei P30 Pro, recién lanzado en la ciudad de París y con el que Huawei vuelve a entregarnos su versión anual sobre cómo es que debiese ser un teléfono hecho para tomar fotografías.
Y es que el público de la serie P es fundamentalmente diferente de los que siguen a los Mate, lo que se nota desde afuera, con la elección de colores y formatos mucho más arriesgados. Con la serie P, por ejemplo, debutó el color Twilight, un acabado metálico que además contaba con un efecto tornasol. Y la novedad de este año es el Breathing Crystal, una suerte de blanco azulado que cambia dependiendo de cómo lo veas y que es realmente bello. Lo dice alguien que históricamente ha elegido el color negro para sus teléfonos.
Ver el Breathing Crystal en vivo es hasta relajante, y durará bien al menos hasta que decidas colocarle una carcasa comprada en Ali Express. Esta vez, piensalo mejor, ya que basta con una protección transparente para no ocultar el impecable trabajo.
La elección de colores más osados también va de la mano de un diseño que si bien, no revoluciona nada, es bastante cómodo y funcional: Una pantalla OLED de 6,47 pulgadas asegura que todo lo que veas, ya sean tus fotos, las de tus amigos o una serie de Netflix se perciba incluso con el sol más radiante.
Los bordes del P30 Pro son casi imperceptibles y la marca volvió a apostar por un diseño que trata de mostrar la mayor cantidad de pantalla posible. Eso significa, adiós al notch del P20, el que es reemplazado por un diseño de gotita, pero también un adiós bastante particular: al de la parrilla de parlantes. El sonido en las llamadas del P30 Pro se emana desde la pantalla misma, y el mismo teléfono te indica donde debes colocar la oreja, que es un poco más abajo de lo habitual. Sorprendentemente, funciona.
Esta aversión a los botones hace que también el P30 Pro incorpore un lector de huellas en pantalla, el es mucho más rápido y confiable que el que debutó con la serie Mate. También está alojado en la parte inferior de la pantalla. No es una tecnología perfecta, pero está avanzando muy rápido y vemos como otras marcas ya la han adoptado así que, todo bien.
El lector de huella en pantalla no es lo único heredado del Mate 20 Pro. De hecho, uno podría criticar que en cierto sentido, ambos equipos aunque sean para públicos diferentes son demasiado parecidos: ambos tienen el procesador Kirin 980, ambos vienen en modalidades de 6 u 8 GB de RAM, ambos con Android 9 y EMUI 9.1. Ambos soportan carga inalámbrica (y también de manera inversa) y se ayudan del poder de la Inteligencia Artificial.
Pero sabemos también que la idea en la industria no es reinventar la rueda cada 6 meses, ni tampoco hay presupuesto que aguante cambiar el equipo cada vez. Sabemos que la Performance de la serie Mate es sólida por lo que saber que tenemos un equipo construido de la misma forma al menos nos dice que será un teléfono capaz de durar de todo el día y correr aplicaciones pesadas sin que le de hipo. El salto hace 6 meses no es mucho, pero hace un año, que es como debería compararse, el cambio es sustantivo.
Y eso que ni siquiera he empezado a hablar de la cámara.
Si lo que más te importa de un teléfono celular es la manera en que éste toma fotos, entonces el P30 Pro tiene muchas cosas que mostrarte.
En lo que parece ser un juego de nunca acabar, el P30 Pro viene este año con cuatro sensores hechos para cuatro tipos de fotos diferentes: Un sensor principal de 40 Megapixeles, que en realidad los combina para hacer fotos de 10 MP mucho más densas, un ultra gran angular de 20 MP, un sensor ToF que trabaja para el efecto de profundidad y desenfoque y la estrella de este año, el telefoto periscópico, que viene con el zoom más espectacular que se haya visto en una cámara de su tipo.
Dicen que el que mucho abarca, poco aprieta, pero en el caso del P30 Pro, es la excepción a la regla. Cada uno de sus modos funciona tal como lo esperas, con una gran atención al detalle y demostrando que la unión entre un excelente hardware con un software pensado en mejorar ese rendimiento es lo que hace la diferencia.
Nosotros ya hicimos todo un artículo demostrando en París las capacidades del lente, pero si quieren la versión corta es la siguiente: es la mejor que he probado.
Y el trabajo de Huawei en este sentido, ha sido saber interpretar muy bien no solo las necesidades de quienes toman fotos móviles, sino que también de las maneras en que mejor pueden venderse, el efecto ¿Cómo hiciste eso? de las redes sociales.
Y el foco de la cámara este año es no solo el zoom, sino que las fotos con poca luz. Ambos logrados con excelencia, de manera sencilla y con sencillez para los que no saben, pero también flexibilidad para los que quieren lucirse. Sin ir más lejos, dejaré la clásica prueba de color y de oscuridad, esta vez tanto en automático como en modo nocturno, porque hay diferencias que vale la pena mencionar.
Prueba de los amiibos:
Poca luz automático:
Poca luz nocturno:
La diferencia entre ambos modos es que mientras el automático opta por aumentar el ISO de la imagen, el modo nocturno lo hace con un mayor tiempo de exposición, por lo que tiende a verse más brillante de lo que realmente es. Personalmente creo que esto tiende a mostrar imágenes que no necesariamente son las más naturales, pero también son las imágenes que hoy acumulan más likes en redes sociales, así que ante eso, no hay nada que hacer. Puntito para el modo nocturno que sigue sorprendiendo.
Pero el punto sigue siendo que, ya sea en el modo profesional o el automático, la cámara del P30 Pro es la más versátil que existe actualmente, con funciones que le permiten tomar buenas fotos de cerca, de lejos, con mucha o poca luz, a personas, a perritos, a objetos o a edificios.
Así que si lo que buscas es un equipo para crear contenido -ya sea fotos o videos, cuyo apartado también ha mejorado- no deberías mirar muy lejos del P30 Pro.
Ahora bien, si hay algo que criticarle al teléfono, es que también hay una falta de ambición de Huawei a la hora de entregar una oferta completa que perfectamente podría haberse convertido en un sólido contendor a teléfono del año. Y es que toda la innovación y mejoras que vimos en el departamento de las imágenes simplemente desaparecieron en todo el resto del equipo.
De hecho, hay cosas que el teléfono perdió con respecto a tecnologías ya probadas por Huawei. El desbloqueo facial ya no usa un sensor 3D, sino que ahora es por imagen, el que sabemos que es rápido pero muy inseguro. El EMUI 9.1, la capa de personalización de Android hecha por la empresa, tampoco trae ningún cambio o mejora sustancial con respecto al resto de la oferta de la compañía. Solo se siente como otro teléfono más y le deja la diferencia a lo hecho por la cámara. O sea, estamos en el 2019 y por algún motivo Huawei sigue insistiendo en que es necesario venir con una aplicación de espejo incluida en el celular.
También se sacrificó el audio estéreo del teléfono al perder la parrilla de sonido frontal, algo que intentaron arreglar colocando una parrilla de sonido extra en la parte baja del teléfono y que para un teléfono cuya experiencia es multimedia, es algo que a la larga se va a notar.
Aunque también hay que ser justos: la mayoría de estas cosas no las va a notar el usuario común, que como uno, no tiene por qué saber cómo eran los celulares hace 6 meses, si los renuevan cada uno o dos años. Y sí, es cierto, el P30 Pro es un teléfono que además de tener la mejor cámara, viene con una batería increíble, una rapidez tremenda y una capacidad envidiable. Pero como un producto que es parte de una industria cada vez más competitiva, siento que faltó algún truco nuevo con la Inteligencia Artificial, con el software o con el diseño.
Pero si nada de eso te importa y simplemente deseas tener una verdadera navaja suiza de imágenes en tu bolsillo, no tienes que pensarlo dos veces: Huawei volvió a demostrar que en lo que respecta a cámaras son capaces de entregar la mejor experiencia posible y rodearla de un organismo que le permite sacar lo mejor de si. Y en un mundo donde la imagen es rey, tampoco podemos culparlos de enfocarse sólo en una parte del teléfono, que para gran parte de la generación actual, es la más relevante de todas.
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