En un escenario en el que las grandes compañías están apostando por elevar la vara en lo que concierne a los tope de línea, con equipos tan costosos que se vuelven prohibitivos para gran parte de la población, especialmente cuando hablamos de la onerosa tendencia plegable pro-ejecutivos de grandes ingresos, el campo de los equipos de gama media está entregando cada vez más apuestas que cumplen por sobre lo esperado. Y eso es algo que se remarca especialmente en aquellos que adquieren funcionalidades que previamente solo estaban en la gama alta.
Eso es precisamente lo que sucede con el Nokia 7.2, un celular que ha rondado en el mercado durante los últimos meses y que probamos por varias semanas desde fines del año pasado, lo que nos permitió sacarle el jugo a una apuesta que sale adelante, de partida, por el hecho de ser un equipo con una interfaz de Android puro. Eso no soplo simplifica su experiencia de uso, sino que también entrega buenas proyecciones para sus actualizaciones a futuro.
Pero también está ahí su cámara con modo oscuro impulsado por inteligencia artificial y un rendimiento general bastante apropiado considerando las siguientes prestaciones técnicas.
- Pantalla LCD de 6.3 pulgadas
- Sistema operativo Android 9 Pie
- Procesador Snapdragon 660
- RAM: 4GB / 6GB
- Almacenamiento: 64GB/128GB, ampliable hasta 512GB
- Batería: 3,500mAh
- Cámaras traseras: 48 megapixeles (f/1.9), gran angular de 8 megapixeles y lente de profundidad de 5 megapixeles
- Cámara frontal: 20 megapixeles
- Puerto de audífonos, ranura microSD, conectividad USB-C, NFC, Bluettoh 5.0
Como un celular bastante sencillo, incluyendo un diseño ligeramente curvo que no busca ser grandilocuente, el Nokia 7.2 casi no tiene biseles y, aunque su pantalla LCD no rinde tanto como las OLED que marcan el panorama en la gama alta, cuenta con la tecnología suficiente para ser un display brillante que funciona correctamente, especialmente en la reproducción de videos en HDR10 que realza los negros.
Pero más allá de ese aspecto de pantalla, que personalmente creo que basta y sobra para evitar ir por opciones más costosas, habitualmente el público general estará más pendiente de los resultados de su cámara. En este caso, por ejemplo, tenemos una triple trasera con óptica ZEISS que está en un círculo situado justo encima de su sensor de huella.
En ese apartado, el equipo funciona bastante bien en las tomas iluminadas, mientras que sus tres sensores realizan un trabajo apropiado que obviamente incluye mejoras plásticas propias de la inteligencia artificial. Eso también compete a su modo retrato, que incluye la posibilidad de edición para ajustar un poco tus preferencias. En lo que concierne a su cámara frontal, de 20 megapixeles, los resultados también son bastante buenos cuando existe una buena luminosidad. Pero los mejores resultados están en la personalización manual de su opción "Pro", que permite tomar control del obturador, su ISO y enfoque.
Claro que también otro elemento enganchador tiene relación con su modo noche, que mejora notablemente la captura en condiciones de baja luminosidad, que es el gran pero del equipo. Obviamente eso solo está en el aspecto fotográfico, ya que no esperen ese tipo de mejora automática en lo que concierne a sucaptura en video. Este solo saca buenos resultados en entornos controlados, como aquellos que no requieren grandes panorámicas ni acercamientos extremos, aunque sí captura a 4K a 30 fps.
La siguiente, por ejemplo, es una imagen on el modo noche en cuestión.
La batería del Nokia 7.2 tuvo un rendimiento apropiado para un uso diario centrado en las redes sociales, por lo que solo requería de la clásica carga nocturna, aunque sí es necesario recalcar que no cuenta con carga rápida. Pero a grandes rasgos el resto de sus componentes satisfacen muy bien a las necesidades básicas de un smartphone.
Pero aún así tengo que plantear que dos problemas resaltaron en mi experiencia con el equipo. Lo primero tuvo relación con el botón a la izquierda que sirve de acceso directo a Google Assistant. Sí, es bastante útil, pero también demasiado sensible. En más de una ocasión se activó sin querer el asistente. El otro inconveniente fue con la ubicación del parlante, ubicado en la parte inferior del equipo. Por la forma en que tomo los celulares, en más de una ocasión tapé la salida de audio con la mano, por lo que la reproducción no siempre estuvo en la mejor calidad.
Claro está, esos son solo detalles en mi experiencia personal como usuario y no representaron cosas que no pudieran ser solucionadas con la costumbre en su uso. Y es que las prestaciones de utilizar un equipo como este, que cumple tan bien a rasgos generales, las suplieron cabalmente y no tengo nada negativo que remarcar más allá de esos elementos puntuales.
El Nokia 7.2 fue lanzado, en colores verde y negro, y se puede encontrar en el retail a un precio de $250 mil pesos chilenos.