A la fecha, la experiencia de proyectar una imagen con los dispositivos tradicionales no me parecía algo realmente atractivo. Claro, se logra un tamaño de imagen superior, pero su calidad de imagen simplemente está a años luz de siquiera competirle a un televisor de última generación como los Qled/Oled.
De ahí que cuando Samsung nos ofreció la posibilidad de acceder a su nuevo dispositivo de lujo, bautizado como The Premiere, de inmediato me interesó por su propuesta de proyección láser 4K. Más aún, en tiempos de pandemia, antes de que las salas abriesen sus puertas, realmente extrañaba una experiencia de cine.
Puestas esas cartas sobre la mesa, reconozco que la primera impresión superó todas las expectativas. Sin exagerar, piensen en el lobo de Tex Avery y se acercarán a mi impresión ante la experiencia de este proyector que representa un salto cualitativo respecto a otras experiencias que he tenido en el pasado.
A grandes rasgos, The Premiere es un equipo extremadamente fácil de instalar y configurar. Aunque puede ir acoplado al techo, basta con instalarlo a 11 de centímetros de una pared para proyectar una imagen 4K UHD de hasta 130 pulgadas.
Obviamente, si quieren llenar una pared, sacrificando un poco otros aspectos, también pueden hacerlo, ya que el manejo de este dispositivo permite lograr ajustes a la medida de cada usuario.
La siguiente imagen no hace justicia a la calidad de su imagen, pero sirve para que se hagan una idea de lo simple que es su sistema de proyección:
En términos de configuración, incluye un menú que incluye un nivel de personalización bastante amplio. Pueden ajustar las opciones para quitar el siempre aborrecible “modo teleserie” y lo mejor de todo es que el proyector también incluye el “Filmaker mode” para proyectar a la perfección una película en disco o streaming que lo soporte.
Lo otro bueno de este equipo es que también funciona como un Smart TV, por lo que tras una simple configuración - para conectarlo al Wi-Fi de la casa y a nuestro smartphone a través de la aplicación de dispositivos inteligentes de Samsung - tenemos acceso a un equipo que precarga las aplicaciones más demandadas. Ahí están Netflix, Amazon Prime, Disney+ y el nunca mal ponderado Youtube, por nombrar algunos.
Además, teniendo un teléfono Samsung Galaxy, también se pueden enviar las imágenes desde el teléfono o conectarle algún dispositivo adicional en uno de sus puertos HDMI para abrir las posibilidades. Un Chromecast, un Roku, un computador, una consola, lo que se les ocurra con HDMI.
En esa área de manejo, mis pruebas se enfocaron tanto en las aplicaciones instaladas, que funcionan como es debido, por lo que una película en 4K de Netflix, Disney o otro strreaming se ve de forma excepcional.
También puse a prueba el equipo con un simple Chromecast (no hubo problemas), un reproductor de Blu-Ray con entrada USB (Para probar algunos MKV en 4K) y lo más importante de todo: una consola de última generación, para sacarle realmente el jugo a la proyección.
Con ese último equipo no solo pude disfrutar una partida de Fortnite con la pantalla más absurdamente grande que uno pueda imaginar, lo que fue una experiencia bastante llamativa y sin ningún tipo de retraso, sino que también lleve a cabo mi verdadera prueba de fuego: ver una película de un disco 4K Ultra HD. Puntualmente, la maravillosa remasterización HDR de 2001: A Space Odyssey.
Señoras y señores, debo recalcar que con eso último accedí a la mejor experiencia que he tenido a la hora de visualizar una película en el hogar. Fue tener una experiencia de cine en un entorno en el que no iba al cine desde marzo de 2020 debido a esta maldita pandemia.
De ahí que entenderán que solo tengo flores para destacar la definición, el contraste y el trabajo de negros sobre una de las paredes del living. Lo más notable de todo es que ni siquiera se trata de una pared blanca, por lo que de seguro la presentación es aún más impecable sobre un telón de proyección.
Antes de cerrar, lo único que me basta agregar es que ni siquiera es necesario tener una barra de sonido o algún extra para el audio, ya que el proyecto incluye un sistema de audio de 40W que integra 4.2 canales. Obviamente pueden apostar por una barra con sonido Dolby Atmos, pero en primera instancia tampoco sentí que el resultado del sonido no fuese impecable para una experiencia hogareña.
La compañía lanzó en Chile dos modelos. Por un lado está el LSP7, un proyector láser que alcanza 120 pulgadas y que tiene un costo de $1.999.990.
La otra versión es la tope de línea, utilizada para esta prueba, que cuenta con un sistema triple láser y proyección de hasta 130 pulgadas. El costo de este último alcanza a los $3.499.990.