En medio de la promoción del nuevo documental de Netflix centrado en la relación con su padre, el actor Robert Downey Jr. fue consultado por Netflix sobre el factor que le dio un nuevo impulso a su carrera: el universo de Marvel Studios.
En ese sentido, el intérprete de Iron Man explicó que más allá de la historia, lo que más extraña tras terminar su participación en Avengers: Endgame es la gente con la que colaboró por más de una década.
“¿Qué es lo que más extraño? Estar en las trincheras con Kevin Feige todo el tiempo; el comienzo con Jon Favreau, ahora eso es como un hermoso sueño. La parte del medio, con Shane Black en Iron Man 3, acabábamos de tener Exton y lo filmamos principalmente en Wilmington, Carolina del Norte. Fue idílico y subversivo”, dijo Downey Jr a Deadline. “Y el final, cuando me di cuenta de que había hecho tantos amigos cercanos en el elenco de MCU, y los hermanos Russo me ayudaron a abrazar el arco de Tony”, finalizó.
Robert Downey Jr. protagonizó la primera película de Marvel Studios y posteriormente se convirtió en el eje de toda la franquicia al interpretar a Tony Stark. De ahí que su relación con el Capitán América de Chris Evans y su rol de padrino del Peter Parker de Tom Holland se instalaron como elementos emocionales que contribuyeron al éxito de las últimas películas de Los Vengadores.
Aún así, aunque su tiempo como Iron Man ya concluyó, los fanáticos insistentemente especulan con un eventual retorno para presentar a una nueva versión de Tony Stark. Especialmente considerando que el MCU ahora podrá presentar versiones alternativas cortesía de la saga del Multiverso que ya está en pleno proceso.