En lo que quizás es un intento por separar a Batman de la generación industrial de películas de superhéroes, que es el nicho de mayor éxito en el cine actual, el actor Robert Pattinson reiteró sus palabras respecto a que no considera que el personaje, piedra angular del género desde su creación en la década de 1930, sea un superhéroe.
En conversación con el programa Today, el actor que protagonizará The Batman sostuvo que el hombre murciélago "no es un superhéroe. No cuenta. Necesitas tener poderes mágicos para ser un superhéroe". En octubre de este año, Pattinson ya se había referido al respecto, planteando que: "Batman no es un héroe. Es un personaje complicado".
Dicha frases obviamente en el fondo están equivocadas, ya que un superhéroe no necesita necesariamente tener "poderes mágicos".
Aunque generalmente los supehéroes poseen poderes sobrenaturales o sobrehumanas, también llamadas "metahumanas" por las propias historias de los cómics, el mayor factor que los define es que se trata de personajes que luchan contra el mal, con un traje que los identifica, y protegen a los ciudadanos, y por extensión al mundo, durante sus aventuras regulares.
Aunque inicialmente dicho mal era encarnado por empresarios y políticos corruptos (en el caso de Superman) o resolver crímenes de malhechores (como fue con Batman), con el paso del tiempo también se instaló la idea de detener la acción de los supervillanos. Estos últimos, obviamente, tampoco requieren "poderes mágicos" y así lo constata el Joker, el mayor némesis del murciélago.
En el caso de Batman, su condición de superhéroe, desde su origen, está relacionado a su intelecto investigativo, dominio de las artes de combate y, por sobre todas las cosas, sus gadgets tecnológicos, por lo que su estatus de superhéroes proviene del baticinturón y su batimóvil, entre otros. Tal como Iron Man, tiene el poder del dinero.
De ahí que en la entrevista en cuestión le hicieron notar a Pattinson que Batman utiliza una capa, y por ende tiene una característica propia de los superhéroes, por lo que el actor no tuvo otra más que conceder ese punto.
Pero lo más importante es que a lo largo de toda la historia en los cómics, Batman no ha sido una sola cosa, no puede ser definido solo de una manera. Ya sea desde sus orígenes más pulp, su giro durante la época de la censura de la Comics Code Authority, en historias que lo llevaron al espacio o inclusive le dieron poderes, o la reinvención moderna marcada por Frank Miller.
De ahí que desconocer la esencia, y lo que es una de las piedras fundancionales del accionar superheroico junto a Superman, solo empaña el propio entendimiento del personaje. Por mucho que el director Matt Reeves vuelque su próxima película a un entorno más de detective, eso solo lo plasmará como una de las caras del diamante que es Batman.
Sí, los superhéroes son personajes ficticios que tienen poderes increíbles, pero también por definición lo son aquellas personas muy heroicas. Y el guardián de Gotham sacrifica su vida a diario por ello. Ya lo decía el propio Frank Miller en un panel que celebró los 75 años del personaje en 2014: Batman es "un gran diamante multifacético" con el que se puede hacer cualquier cosa. Y como todo diamante, se haga lo que se haga, el personaje "nunca se romperá".