Como parte de su camino hacia Wrestlemania 35, la campeona Ronda Rousey está sacando lo mejor de su su nueva condición de villana, que en términos de lucha libre se conoce como "heel", y disparó contra lo que cataloga como el circo glorificado de la lucha libre.
En esos términos, no solo ha expresado que la lucha libre es falsa, rompiendo así la cuarta pared del mayor código de este entretenimiento, sino que también considera que la WWE y todos los que son parte de la empresa son un chiste. De hecho, tildó a sus rivales de "perras de carro de carnaval".
La excampeona de la UFC remarcó que no le importan los abucheos de la audiencia, especialmente desde que los fans gritaron que "se mereció" los ataques con un palo de kendo por parte de Charlotte Flair, y los tildó de "cobardes". Ese mismo apelativo usó contra Becky Lynch.
Además, la campeona femenina de RAW dijo que no habrá un santuario en el que sus rivales de Wrestlemania, Becky Lynch y Charlotte Flair. puedan resguardarse una vez que se enfrenten, ya que "las humillará" en el evento más importante del año.
De hecho, explicó que descalificó a Charlotte para poder derrotar a Becky y Flair, con lo demostrará que los luchadores de la WWE son unos "estafadores cursi". Y, por lo tanto, cualquiera que crea que sus rivales pueden derrotarla, o crean en la charada que representa el show de la WWE, simplemente es "un chiste".
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Y es todo ese desdén por la lucha libre, y la propia historia como excampeona de la UFC, lo que convierten a Ronda en uno de los personajes más cautivantes de la actualidad y, además, la heel más importante de cara a lo que será Wrestlemania 35.