Este miércoles Samsung presentó al Galaxy Note 10, un smartphone que eleva aún más el número de equipos tope de línea de la compañía surcoreana. La misma que reconoció una caída en las ventas de sus modelos flashship durante el segundo trimestre de este año.

Pongamos sobre la mesa: en febrero Samsung ya anunció seis equipos de gama alta de la familia Galaxy, incluyendo al Galaxy S10E, el central Galaxy S10, la variante Galaxy S10 Plus y el modelo Galaxy S10 5G.

A esos cuatro, también sumaron al plegable Galaxy Fold y su variante Fold 5G, los cuales sufrieron un retraso en su lanzamiento debido a problemas en su diseño. A todo eso ahora agreguen a los dos nuevos dispositivos presentados durante esta jornada.

Sin entrar a fondo en las especificaciones, el Note 10 será un equipo con carga ultra rápida y una perforación central para su cámara frontal. Más importante, la línea Note por primera vez contará con dos modelos: el "básico", con una una pantalla de 6.3 pulgadas, y uno Plus, con una pantalla de 6.8 pulgadas. A este último le pusieron toda la salsa.

Ambos equipos no cuentan con jack de auriculares ni el botón de Bixby, aunque la compañía mantiene a su asistente. En términos de almacenamiento, solo la versión Plus tiene opción de microSD.

Con precios entre los $950 dólares y los $1.300 dólares, para el equipo plus con 5G, su gran gancho apunta a un S Pen con nuevas características, como gestos aéreos o la posibilidad de cambiar remotamente entre lentes de cámara. También los Note 10 tendrán un editor de vídeo integrado y, en el caso del Plus, un nuevo procesador más eficiente para algunas zonas del mundo: el Exynos 9825.

Pero nada de lo anterior en el papel, incluido el resto de las especificaciones técnicas de las cámaras, representa un salto llamativo respecto a lo que Samsung ya anunció o lo que actualmente tiene en el mercado. Sí, en algunos casos son una mejora respecto al Galaxy S10+, pero nada insoslayable. Y ese es el punto.

Originalmente, la línea Note de Samsung buscaba destacar por su tamaño, siendo una "phablet" que marcaba la diferencia por su pantalla y el uso del stylus. Ahora el plegable y costoso Fold no tendrá rival, mientras que un S10 Plus tiene una pantalla más grande que la versión básica del Note 10. Esta última variante es la que realmente queda a la sombra.

De ahí que todo parece apuntar a que la versión Plus de este Note 10 será la apuesta para todos aquellos que quieren algo un poco más grande que el S10, pero que no están dispuestos a acceder al costoso Fold. Y ahí la gran interrogante sigue siendo la misma al considerar el alto costo de estos equipos: ¿basta con eso?