El 15 de mayo pasado, Stan Lee sorprendió a la industria del entretenimiento al presentar una denuncia contra POW Entertainment!, la productora de contenido que el mismo padre de Spider-Man co-fundó el año 2001 por una suma no despreciable de mil millones de dólares.
La demanda, impuesta ente el tribunal de Los Angeles, acusaba a la compañía de fraude y de apropiación de imagen, luego de que esta fuese vendida a una empresa china el año 2017. La demanda señalaba que Stan Lee fue engañado para aceptar el trato, que le entregaba a los nuevos dueños de POW! todos los derechos sobre su imagen, su nombre y su obra. Además de eso, los acusaba de haber querido robar su cuenta de Twitter y de hacerse pasar por el legendario hombre de las historietas.
Sin embargo, tras dos meses en el tribunal, hoy la defensa de Stan Lee decidió anular el juicio contra POW! porque, en palabras del propio Stan Lee, todo esto habría sido parte de un malentendido.
"Esto ha sido muy confuso para todos, incluso para mí y los fanáticos, pero ahora estoy feliz de estar rodeado por los que quieren lo mejor para mí. Me entusiasma dejar esta demanda detrás y volver a trabajar con mis amigos y colegas de POW!", señaló Lee en un comunicado que suena muy diferente al de alguien que hace dos meses alegaba que esta empresa había querido estafarlo.
¿Qué cambió en este tiempo entonces? Todo parece indicar que la mala influencia de Keya Morgan, el ex manager de Stan Lee, a quien se le dictó una orden de alejamiento en el mes pasado y que ahora fue vuelta a renovar.
La Corte Suprema de Los Angeles volvió a emitir la orden de alejamiento para proteger tanto a Stan como a su hija JC Lee de Morgan, a quien se le acusa de abuso, robo de 5 millones de dólares en especies y de adueñarse de la vida de Stan Lee, obligándolo entre otras cosas a hacer videos siguiendo un guión. A Morga se le acusa de haber alejado a Stan Lee de todo el mundo y convertirse en su filtro para comunicarse, además de alejarlo de sus colaboradores clásicos, y también de haber estado detrás de confusos incidentes que involucraron a la policía, como llamadas por abusos que nunca ocurrieron.
Es por eso que nadie se sorprende que Stan Lee, alejado de la influencia de este oscuro personaje, haya desestimado la demanda en contra de sus colaboradores. Y es que por muy confuso que vaya pareciendo la trama, cada vez se está aclarando más la identidad del villano.