Mucho se ha hablado en los últimos días sobre el legado y la importancia del trabajo que dejó Stephen Hawking, el astrofísico que falleció el miércoles pasado a los 76 años de edad. Pero quizás su aporte más importante al mundo de la ciencia y de la comprensión del universo no lo veamos sino que en varias décadas más, y sea fruto del último trabajo científico del cual formó parte y que logró publicar apenas dos semanas antes de su triste deceso.
El paper, llamado "A Smooth Exit from Eternal Inflation", fue trabajado en conjunto con el científico belga Thomas Hertog y plantea resolver uno de los problemas de la teoría inicial de Stephen Hawking sobre el origen del universo, en la que no sólo hablaba de la existencia del big bang para explicar la formación de nuestro universo, sino que de la posible existencia de un número infinito de big bangs que habrían creado un número infinito de universos, lo que hoy se conoce como la teoría de los multiversos, la cual desde ese entonces ha sido usada y abusada por diferentes historias, principalmente de ciencia ficción.
El principal problema de este concepto es que, hasta ahora, se ha convertido en algo imposible de comprobar. Y tiene que existir una forma más fácil de saber que simplemente esperar que algún día se abra un portal dejado por seres de alguna civilización superior. Pero en este nuevo trabajo, Hawking sostiene que es posible comprobar la existencia de estos universos al analizar la radiación generada por la explosión del big bang en el origen del tiempo.
Para ello, será necesario enviar sondas espaciales que viajen al espacio profundo con sensores capaces de detectar la radiación cósmica en el fondo del universo. Esta radiación sería la clave para comprobar esta teoría, y abriría la puerta para el estudio de los multiversos ya no sólo como una posibilidad, sino que como una nueva dimensión de la exploración espacial.
Aunque, de comprobarse esta teoría, también lo haría otra un poco más deprimente y que va de la mano con el origen del universo y que es el hecho de que una vez se acabe la energía de todas las estrellas del firmamento, entonces los universos comenzarán a desaparecer. Así que el desafío para el futuro es poder encontrar una puerta hacia estas otras dimensiones antes de que la mismas existencia comience a colapsar.